No es la primera vez que escribo sobre cocina, pero claro, es un tema con el que tenemos que lidiar diariamente, y esto lo saben bien las amas de casa, y los nuevos restauradores ocupados en la búsqueda de novedades que ofrecer para poder decir “yo mejor”. Pero esto no es nuevo ni mucho menos. ¿En qué momento se pensó en la pitanza como algo que además de necesario para vivir, podía ser deleite para el paladar? ¡chi lo sa!

Quitémonos la medalla de “qué grandes somos, hay que ver, qué inventivas, qué bien lo hacemos”, porque una última investigación ha descubierto restos de comida carbonizada en vasijas de barro de hace 5.000 años de antigüedad. Este análisis se remonta a la Edad de Piedra y da una visión de los métodos de cocción de entonces. Hemos dicho carbonizada, sí, pero los investigadores se preguntan si a nadie le ha ocurrido dejar la sartén o las cacerolas más tiempo de lo debido en el fuego.

Esto me recuerda a aquel que siempre le decía a su mujer “la comida de mi madre sabía mejor, la comida de mi madre sabía mejor, ella sí que cocinaba bien”. Era un mantra que el hombre repetía cansinamente cada vez que se sentaba a la mesa. Pero un día, a la esposa se le olvidó retirar a tiempo la olla del fuego, ignoramos si era de gas, eléctrica o de inducción, y el guiso quedó casi en cenizas. Y como quien no quiere la cosa, como siempre se la sirvió al marido. Y éste, lleno de júbilo exclamó, “¡Riquísima, buenísima, exquisita! ¡Así, así la hacia mi madre!”. No sabemos si a aquellos ancestros nuestros se les quemó el menú encontrado, por casualidad, o si realmente lo preferían así. Sea como sea, ellos cocinaban gachas, algo muy sabido en las cocinas no tan lejanas. ¿Recuerdan la harina de la legumbre llamada almorta? Gachas, dicen los investigadores, “compuestas por cereales como el trigo escanda y la cebada, y semillas almidonadas de la planta silvestre, la pata de ganso blanca”. Esto y mucho más se puede leer en el informe sobre el tema que nos ocupa, publicado por la Universidad de Kiel (CAU), que también señala que en los utensilios se detectaron residuos de leche y de grasa animal. Y así, tal y como se dice, gracias a esta investigación podemos comprobar que aquella gente maravillosa, y creo que lo era, con tan poquitos medios, pero con un buen apetito e inteligencia natural, preparaban sus comidas.

QOSHE - Comida quemada - Mariluz Villar
menu_open
Columnists Actual . Favourites . Archive
We use cookies to provide some features and experiences in QOSHE

More information  .  Close
Aa Aa Aa
- A +

Comida quemada

19 0
12.05.2024

No es la primera vez que escribo sobre cocina, pero claro, es un tema con el que tenemos que lidiar diariamente, y esto lo saben bien las amas de casa, y los nuevos restauradores ocupados en la búsqueda de novedades que ofrecer para poder decir “yo mejor”. Pero esto no es nuevo ni mucho menos. ¿En qué momento se pensó en la pitanza como algo que además de necesario para vivir, podía ser deleite para el paladar? ¡chi lo sa!

Quitémonos la medalla de “qué grandes somos, hay que ver, qué inventivas, qué bien lo hacemos”, porque una última investigación ha descubierto restos........

© La Región


Get it on Google Play