CAMAGÜEY.- Las parábolas no son fábulas ni alegorías, son historias cortas con un trasfondo moral que suponen hechos reales con espíritu crítico o expositivo. Están destinadas a hacer reflexionar. Su interpretación puede ser diferente, pues supone que el interlocutor posea una determinada cultura o algún vínculo con lo expuesto.

Estilo narrativo del habla coloquial de uso común en las lenguas romances, era utilizado de antiguo por campesinos, pescadores, artesanos y trabajadores humildes de diversos oficios debido a su sencilla exposición y fácil entendimiento. Hacer razonar con pedagogía es el destino primordial de estos llamados.

PRIMERA PARÁBOLA

Artistas y soñadores de la Naturaleza decidieron un día, aplicando ciencia y experiencias, hermosear la entrada principal del Casino Campestre, en la ciudad de Camagüey. Con iniciativa e ingenio levantaron una fuente con un grupo de flamencos como espejo del Parque Zoológico situado a su sombra. No sin contradicciones, el público en general aplaudió la obra por años.

Trabajadores de Servicios Comunales se dedicaron al cuidado y limpieza de la fuente, admiración de muchos, en especial de los niños que de costumbre frecuentan este espacio verde.

Hacia el 2022, en un difícil momento de nuestra economía, como este, como tantos, decidieron demoler aquella obra, supuestamente para hacer otra. Sin embargo, ya desde entonces, la colega Yanetsy León González alertaba en el reportajeCaso Fuente del Casino: “Lo que más alarma de la demolición de la fuente de los flamencos es que no hay nada claro ni decidida la solución —según quienes dieron la cara a la prensa en el intento de explicar lo sucedido…”.

¿Resultado? Allí están desde hace mucho, octubre de 2022 para ser exactos, las ruinas de la fuente entorpeciendo el paisaje, ofreciendo a la ciudad un ambiente mugroso para vergüenza de los camagüeyanos. Dado el bochorno hasta Comunales abandonó su obligación de limpieza. Mas, ¿es justa la indolencia?

SEGUNDA PARÁBOLA

Hace 80 años por lo menos, durante una de las tantas etapas de embellecimiento, se construyó en el Casino Campestre, a orillas de las márgenes del arroyo Juan de Toro, la fuente del cisne, pieza de atractivo general cuyas fotos, como la del Capitolio Nacional en La Habana, han recorrido el mundo.

En un avatar contemporáneo de mejoras en el gran parque, el cisne voló. Se fue. Lo robaron con tan buena maña que a pesar de estar en un sitio público nunca apareció por ninguna parte. En 2022, otro cisne alado ocupó el sitio del anterior, justo en febrero, como regalo por el aniversario de la otrora Villa.

Ahora, donde está colocado resulta tal vez el rincón más sucio del Casino. Puede que los cuidadores razonen: ¿para qué limpiar la fuente del cisne si donde estuvo la de los flamencos, situado más a la vista, no se desembarra? No sé, tal vez una cosa trajo la otra. ¿Será?

Lo que sí no puede negarse es el estado de suciedad y abandono de estos dos emblemáticos sitios y en general del mayor parque urbano del país. Monumentos y otras construcciones descuidados, aceras y vías inundadas de hojas secas (que bien le hacen al suelo y como abono natural para los árboles, pero no a los lugares por donde caminamos), basura por doquier...

El valor de la civilización está en hacer obras que simbolicen cada generación, que perduren como herencia en el corazón de los tiempos. Difícilmente los basureros pasen a la historia y, por supuesto, tampoco quienes los construyeron. ¿Será lo ocurrido a estos flamencos y al cisne señal de nuestros tiempos? Ojalá que no.

QOSHE - Parábola de los flamencos y el cisne - Eduardo Labrada Rodríguez
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Parábola de los flamencos y el cisne

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03.04.2024

CAMAGÜEY.- Las parábolas no son fábulas ni alegorías, son historias cortas con un trasfondo moral que suponen hechos reales con espíritu crítico o expositivo. Están destinadas a hacer reflexionar. Su interpretación puede ser diferente, pues supone que el interlocutor posea una determinada cultura o algún vínculo con lo expuesto.

Estilo narrativo del habla coloquial de uso común en las lenguas romances, era utilizado de antiguo por campesinos, pescadores, artesanos y trabajadores humildes de diversos oficios debido a su sencilla exposición y fácil entendimiento. Hacer razonar con pedagogía es el destino primordial de estos llamados.

PRIMERA PARÁBOLA

Artistas y soñadores de la Naturaleza decidieron un día, aplicando ciencia y experiencias, hermosear la entrada principal del Casino Campestre, en la ciudad de Camagüey. Con iniciativa e ingenio levantaron una fuente con un grupo de........

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