Los números del Feyenoord en casa en Europa y la disponibilidad del delantero mexicano, las dos grandes diferencias con respecto al Metropolitano.

Santiago Giménez despierta a tiempo. El delantero mexicano, gran figura del Feyenoord campeón de la Eredivisie la temporada pasada, se perdió el partido de la primera vuelta de esta fase de grupos en el Metropolitano por sanción. Está firmando un inicio de curso muy bueno, con 16 goles en liga y dos en Champions, pero justo se había estancado en las últimas semanas, en las que llegó a acumular seis partidos seguidos sin anotar contando tanto su club como la selección. El hat-trick que consiguió ante el Excelsior en un derbi de Róterdam que se llevó su equipo por 2-4 puso fin a esta mala racha y hará que llegue de nuevo con la máxima confianza al choque frente a los colchoneros.

Un local temible. El cuadro de Róterdam está siendo prácticamente inexpugnable en casa esta temporada. Ha ganado los dos partidos de Champions League que ha jugado en De Kuip (2-0 al Celtic y 3-1 a la Lazio) y en liga neerlandesa sólo ha cedido un empate frente al Fortuna Sittard (0-0). Ya en sus dos experiencias más recientes en Europa, también con Arne Slot en el banquillo, el factor campo fue decisivo para que el equipo alcanzara la final de la Conference League en 2022 y los cuartos de final de la Europa League en 2023. En total, lleva dieciséis partidos de competiciones continentales sin perder en casa (catorce victorias y dos empates). La última vez que cayó fue en un 0-2 frente al Dinamo de Zagreb en diciembre de 2020.

Una desventaja grande pese a hacerlo bien. Aunque las preocupaciones domésticas pasarán a un segundo plano cuando se inicie el partido de hoy en Róterdam, el Feyenoord está viviendo una temporada algo frustrante en su liga local. Sus números no son malos: tras trece jornadas, ha ganado diez partidos (alguno de ellos, como el 0-4 en Amsterdam ante el Ajax, absolutamente memorable), ha empatado dos y ha perdido sólo uno (frente al Twente, acusando quizá la resaca europea de la victoria ante la Lazio cosechada sólo unos días antes). Y, pese a ello, se encuentra ya a siete puntos de un PSV Eindhoven que ha ganado absolutamente todos los encuentros que ha disputado. Por cierto, el Feyenoord-PSV se juega el próximo domingo. Será un partido crucial para intentar recortar puntos… pero a nadie se le pasa por la cabeza que Arne Slot se guarde nada hoy ante el Atlético. La prioridad es lo más inmediato y las estrellas de la Champions League atraen mucho.

Un 4-2-3-1 ofensivo o un 4-3-3 con un medio más. Slot sólo tiene las bajas del extremo iraní Alireza Jahanbakhsh y del defensor Bart Nieuwkoop. La única duda reside en saber si va a jugar con tres hombres en el medio, con el argelino Zerrouki acompañando a Timber y a Wieffer —que es lo que hizo en el Metropolitano— o si va a prescindir del norteafricano y va a ubicar a tres hombres de ataque por detrás de Giménez —el habilidoso Calvin Stengs, Paixao e Ivanusec—. Sea cual sea el dibujo, el equipo será atrevido, como ya lo fue en Madrid, donde salió a presionar alto y movió la pelota con mucho criterio. Esta vez, además, sí tendrá a su gran goleador.

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