La última bala. Tras ganar dos partidos y empatar otro en los tres compromisos de liga escocesa que el Celtic ha jugado desde el encuentro en Glasgow de la primera fase de grupos de esta Champions League ante el Atlético, el conjunto de Brendan Rodgers viaja a Madrid siendo consciente de que necesita puntuar para mantenerse vivo incluso en la pelea por la tercera plaza del grupo que da acceso a la Europa League al menos. La exigencia en el campeonato doméstico, la Scottish Football League, no tiene nada que ver con la que se encuentra en la Champions, y eso que incluso se le atragantó el primer envite después del 2-2 frente a los colchoneros: igualó a cero en Edimburgo frente al Hibernian. Luego llegaron la remontada contra el Saint Mirren (2-1) y la plácida victoria de este fin de semana en el campo del Ross County (0-3) ante un rival que se quedó en inferioridad numérica a los diez minutos. Quizá la noticia más destacada de este tramo de partidos haya sido que no han visto portería ni el goleador más reputado del equipo, el japonés Kyogo Furuhashi, ni el actual líder de la tabla de anotadores de la Premier escocesa, el danés Matt O’Riley. Ambos fueron titulares en los dos primeros duelos, pero Rodgers les dejó de inicio en el banquillo este sábado para que descansaran de cara al duelo del Metropolitano. Lo mismo hizo con Luis Palma, pero el hondureño demostró que se encuentra en un gran estado de forma nada más salir al campo en el segundo tiempo: marcó un golazo desde fuera del área y luego asistió a James Forrest en el tercer tanto.

Dos opciones. La prensa escocesa viene comentando que Rodgers repetirá el mismo once de Glasgow en Madrid con la única variación del sustituto de un Reo Hatate que se lesionó en los primeros compases de ese choque frente al Atlético. Esa plaza se la disputan el joven portugués cedido por el Benfica, Paulo Bernardo, que es el que ingresó entonces desde el banquillo, o un David Turnbull que ha marcado dos golazos desde fuera del área en los dos últimos partidos. El escocés es uno de los centrocampistas con más llegada de su país: en la campaña 2018-19, cuando sólo tenía diecinueve años, marcó quince tantos en la máxima categoría con el Motherwell. Una lesión frenó después su progresión, pero ya ha recuperado su nivel y parece el favorito para hacerse con la plaza de titular en Madrid. Si es el elegido, compartirá centro del campo con un McGregor más posicional y con O’Riley en el clásico 4-3-3 del entrenador norirlandés.

Rodgers, contra la historia. Aunque a nivel doméstico tiene un palmarés envidiable a los mandos del Celtic, en las competiciones europeas los números de Brendan Rodgers como técnico del conjunto católico de Glasgow son muy flojos. Incluso sumando los seis partidos en los que dirigió al Liverpool, su estadística como entrenador de la Champions League es de dos victorias, seis empates y trece derrotas. Con el Celtic sólo ganó una vez: un 0-3 en el campo del Anderlecht que fue en 2017. James Forrest y Callum McGregor, que siguen en la plantilla, estaban en aquel equipo y participaron ingresando en la segunda parte.

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