No debe de ser casualidad. Que la primera visita en la historia de la Real Sociedad a París, la ciudad del amor, sea un 14 de febrero, el día de los enamorados, no es casualidad. Quiere decir algo. Como si el destino estuviera arrastrándonos a creer que el club txuri-urdin puede terminar de dar ese paso que le sitúe de verdad entre la aristocracia europea. Y eso pasa por enamorar a los parisinos, un público difícil porque está acostumbrado al caviar que le brinda cada semana Kylian Mbappé, en la actualidad el mejor futbolista del planeta. Sin discusión. Una bestia de jugar a fútbol, de marcar goles y de competir. Aunque el foco siempre esté sobre su cabeza, con la eterna cantinela de que este verano sí, de verdad que sí, fichará por el Real Madrid. No se habla de otra cosa a su alrededor, pero él ni se inmuta y sigue jugando como si nada.

CHAMPIONS LEAGUE | PSG-REAL SOCIEDAD

PSG - REAL SOCIEDAD | LUIS ENRIQUE

Que sigan, que sigan hablando de este tema, que sinceramente ya cansa, pero que a la Real le viene de perlas. Porque cuanto más se hable de Mbappé y el Real Madrid, menos se pondrá el foco en esta ida de los octavos de final de la Champions League y más factible será la sorpresa. Sí, sorpresa, porque así debemos calificar una posible victoria de los de Imanol Alguacil en el Parque de los Príncipes. Incluso un empate sería una hazaña. Por presupuesto, plantilla y objetivos está claro que el PSG es el favorito. No es por pasarle la presión a los parisinos, es que es una realidad. Porque aunque Luis Enrique diga que no tienen presión por no haber ganado nunca la Champions, todo el mundo les mete entre los candidatos a levantar la orejona. Y será por algo, digo yo. De la Real no dicen lo mismo, y también será por algo. A veces es mejor llamar a las cosas por su nombre, y así acabamos antes.

Con todo, que nadie piense que la Real Sociedad llega derrotada de antemano a París. Todo lo contrario, aterriza herida en su orgullo, enrabietada por su falta de puntería, e ilusionada por seguir escribiendo otra página de oro en su brillante centenaria historia. Puede que penséis que esta exigente cita no le llega en buen momento. Pero… ¿cuándo es buen momento para jugar en el campo del PSG? O mejor dicho… ¿Cuándo es mal momento para jugar en el Parque de los Príncipes? Y además viaja con ‘refuerzos’ de lujo: David Silva, Arconada y Xabi Prieto. Mucha calidad entre los tres. ¿Cómo no se van a enamorar en París con esta Real? Con ellos nada puede salir mal. Tampoco con el gran capitán, Mikel Oyarzabal, recuperado para la causa. Toda ayuda será poca para un equipo que quiere confirmar en un escenario gigante todo lo que demostró en la fase de grupos. Si lo consigue, París se va a enamorar de esta Real Sociedad. Estoy convencido.