LA HABANA, Cuba. – Por estos días hemos arribado al aniversario 50 de la celebración del XIII Congreso de la oficialista Central de Trabajadores de Cuba (CTC). Se trató de un evento que trazó pautas en el devenir del movimiento sindical castrista, puesto que dejaba atrás una etapa idealista de menosprecio a los sindicatos, para iniciar otra, bajo la batuta del veterano dirigente Lázaro Peña, en la que se pretendía recuperar el trabajo de estos gremios.

Pero lo que pocos pudieron imaginar en ese año 1973 era que medio siglo después de que se encaminara el trabajo sindical, al amparo de una “rectificación” de Fidel Castro y el último suspiro del viejo Lázaro ―murió tan solo cuatro meses después de celebrado el Congreso―, el sindicalismo castrista estuviese envuelto en uno de sus peores momentos.

Esa situación se ha podido constatar durante la reciente celebración del CXIV Pleno del Consejo Nacional de la CTC. En la cita trascendieron infinidad de problemas que actualmente afectan a los trabajadores, operan contra la eficiencia de las entidades estatales y obstaculizan la labor de los sindicatos. Asistimos a una innegable involución del trabajo sindical oficialista.

En lo que respecta a la afectación de los trabajadores se habló de los impagos que sufren muchos productores agrícolas por parte de las empresas estatales; las insatisfacciones con el salario; la demora en el pago y la distribución de las utilidades empresariales, además de otras irregularidades que se presentan (no siempre recibe más quien más aporta); altos niveles de interrupción productiva que contraen aún más los ya insuficientes salarios; una baja ejecución de los presupuestos para la adquisición de ropa, calzado y medios de protección; así como la no satisfacción de las necesidades de los trabajadores con los niveles de producción que se alcanzan en el país.

La actividad empresarial se resiente por la subutilización de las capacidades productivas; la falta de materias primas, combustibles y energía eléctrica; los insuficientes financiamientos en divisas que impiden adquirir parte de los insumos que se necesitan; así como bajos niveles de rentabilidad. También se dijo en el pleno que un total de 280 entidades deben cerrar el actual 2023 con pérdidas (la mayoría pertenecientes a la agricultura, la industria azucarera, la industria alimentaria y la producción manufacturera).

El trabajo sindical se ve lastrado por un debilitamiento de su funcionalidad; un decrecimiento en la afiliación de los trabajadores ―en el sector no estatal solo el 15% de los trabajadores pertenecen a estos sindicatos oficialistas―; irregularidades en la celebración de las asambleas de producción, muchas de las cuales son meros actos formales; la existencia de secciones sindicales dirigidas por personas no capacitadas para ello; así como una insuficiente utilización de los convenios colectivos de trabajo.

No obstante este cuadro calamitoso, el secretario general de la CTC, Ulises Guilarte de Nacimiento, presente en el pleno, insistió en que el deber de los trabajadores es seguir apoyando al régimen.

En ese sentido apuntó: “Luchemos por preservar la grandiosa obra de la Revolución, que es el mayor aporte que puede hacer la CTC a Cuba y a su pueblo. Lo único que no se puede fracturar es la unidad en torno a la Revolución y al Partido” (“Sindicato aterrizado en la Cuba de hoy”, periódico Trabajadores, edición del 13 de noviembre).

Claro, no hay que olvidar que el señor Guilarte de Nacimiento, antes que dirigente de la CTC, se siente miembro del poderoso Buró Político del gobernante Partido Comunista, y por supuesto que nada hará para incomodar a sus compinches de la cúpula del poder.

ARTÍCULO DE OPINIÓN Las opiniones expresadas en este artículo son de exclusiva responsabilidad de quien las emite y no necesariamente representan la opinión de CubaNet.

Sigue nuestro canal de WhatsApp. Recibe la información de CubaNet en tu celular a través de Telegram.

QOSHE - La involución del sindicalismo castrista - Orlando Freire Santana
menu_open
Columnists Actual . Favourites . Archive
We use cookies to provide some features and experiences in QOSHE

More information  .  Close
Aa Aa Aa
- A +

La involución del sindicalismo castrista

8 0
28.11.2023

LA HABANA, Cuba. – Por estos días hemos arribado al aniversario 50 de la celebración del XIII Congreso de la oficialista Central de Trabajadores de Cuba (CTC). Se trató de un evento que trazó pautas en el devenir del movimiento sindical castrista, puesto que dejaba atrás una etapa idealista de menosprecio a los sindicatos, para iniciar otra, bajo la batuta del veterano dirigente Lázaro Peña, en la que se pretendía recuperar el trabajo de estos gremios.

Pero lo que pocos pudieron imaginar en ese año 1973 era que medio siglo después de que se encaminara el trabajo sindical, al amparo de una “rectificación” de Fidel Castro y el último suspiro del viejo Lázaro ―murió tan solo cuatro meses después de celebrado el Congreso―, el sindicalismo castrista estuviese envuelto en uno de sus peores momentos.

Esa situación se ha podido constatar durante la reciente celebración del CXIV Pleno del Consejo Nacional de la CTC. En la cita trascendieron infinidad de problemas que actualmente afectan a........

© Cubanet


Get it on Google Play