Por: Hugo Fernando Cabrera Ochoa

Que la política implementada por el mandatario de los colombianos Gustavo Petro, denominada “Paz Total”, ha permitido que grupos armados al margen de la ley se fortalezcan y retomen con fuerza su accionar, sobre todo en zonas del país que venían gozando de tranquilidad y paz, es la verdad mejor cantada y se constituye en una realidad inocultable.

No obstante, tampoco podemos creer que esto tiene su origen en el “hoy”, porque todos sabemos que Iván Duque Márquez en el pasado gobierno volvió añicos el proceso de paz, el mismo que permitió a los colombianos experimentar unos años con muy bajos niveles de violencia.

Ahora estamos otra vez asediados por organizaciones violentas que extorsionan, secuestran, asesinan y atentan contra los bienes públicos y privados, según sea su interés. Cuando converso con mis estudiantes en el aula de clases de la universidad, ellos se sienten sorprendidos, dado que pertenecen a una generación que no tiene en su memoria la zona de distención, las tomas guerrilleras, los multi secuestros, los retenes ilegales y las pescas milagrosas, entre otras acciones que atentaban contra la seguridad e integridad de muchos compatriotas e incluso de extranjeros residenciados en esta nación.

Del departamento del Huila se habían ido estos fenómenos, y en cambio, habían retornado empresarios oriundos de este territorio que habían tenido que emigrar dada la inseguridad, e incluso llegaron miles de turistas que generaron reactivación y dinámica económica en municipios como Gigante, Palermo, Isnos, Villavieja, San Agustín, Rivera, Yaguará, Pitalito, Tesalia, Paicol, entre otros.

Ahora con el brote de inseguridad, la situación en el departamento se comienza a complicar un poco y la afluencia de visitantes de diferentes partes del país e incluso del mundo, empieza a disminuir; así me lo narró en estos días una estudiante de Administración de Empresas Turísticas, quien junto a su familia posee un hotel campestre en el desierto de La Tatacoa; me contaba que la demanda de servicios había disminuido cerca de un 50%, algo sumamente preocupante para ellos. Y no solo ese sector se ve afectado, productores agropecuarios y otros ciudadanos que desarrollan diferentes actividades económicas están pasando por momentos de angustia.

Tras esta situación, el gobernador del Huila Rodrigo Villalba Mosquera, ha venido haciendo un vehemente llamado al gobierno nacional y a la fuerza pública, tanto ejército como policía, exigencia que ha sido atendida por el ente central, razón por la cual el día de hoy sábado 16 de marzo, el ministro de defensa Iván Velásquez hace presencia en la ciudad de Neiva, en donde desarrolla un consejo de seguridad, y como producto de éste dará a conocer las medidas que se tomarán para recuperar la seguridad en el departamento.

Se espera que una de las medidas sea el aumento del pie de fuerza tanto del Ejército como de la Policía Nacional, así como el suministro de equipos y material necesario para poder atender tan compleja situación.

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