Hay autocracias abiertas y autocracias cerradas, ambas deforman la Democracia. La Autocracia en situación larvada empieza con el autoritarismo o exceso de mando del gobernante.

Con el paso de los meses y ante más concentración del poder ese gobernante se puede enrutar hacia la autocracia. Los gobernantes transformados en autócratas pueden provenir de elecciones populares, o como outsider, o como el resultado de coaliciones multipartidistas. El autócrata puede resultar del populismo de derecha o del populismo de izquierda.

En un comienzo nadie avizora o calcula que ese nuevo gobernante que se transformara, a veces ni él mismo mide ni planea su transformación.

Son varios factores los que facilitan la mutación : la acumulación del poder, las circunstancias y sus aliados de ocasión, la economía boyante del país, las nuevas relaciones internacionales de coyuntura, la geopolítica y sus cambios, varios factores pueden propiciar la transformación.

Y existen autócratas que han perdido el poder, pero conservan el partido político que construyeron y quieren regresar al mando de la nación , para ello empiezan campañas de desestabilización premunidos del dinero que atesoraron y en alianza con los reductos del poder que subsisten dentro de las instituciones, de esta manera comienzan a fabricar lawfares y se encadenan con los medios de comunicación tradicionales, este poder mediático es el más contundente para desdibujar la imagen de quien quieren tumbar.

La Democracia mal entendida y mal manejada permite que aparezcan las autocracias porque los líderes de los partidos van perdiendo el horizonte del funcionamiento de gobiernos que se vuelven laxos, permisivos, corrompidos; dan mal ejemplo del manejo de la hacienda pública, la oposición la vuelven rencillas permanentes y descrédito del oponente y terminan todos desacreditados.

Le abren paso a figuras sin partido político serio, repentistas y promeseros. Facilitan el aparecimiento de populistas y outsider. Miremos el caso de Milei en Argentina. La competencia electoral entre partidos que se destazan u confrontan sin límites, termina siendo un manoseo de la Democracia, una degradación que le abre el camino a quienes no son estadistas, acuden a las elecciones, se aprovechan de la incertidumbre y ya instalados en el poder se van aferrando al mando y se transmutan.

Trump y Bolsonaro son dos casos de autócratas que se toman un partido político y luego se toman el gobierno, con bulos, mentiras y fakenews manejan el poder y se enfrentan a los medios, y luego no quieren entregar el mandato, proceden a torpedear al que gana, para repetir el gobierno con fraude, desconociendo al ganador e incitando a los seguidores para asaltar los capitolios.

Lograr mantenerse dentro de los cánones de la Democracia implica o significa que ese país debe impedir que la cúpula en el poder lleve a la nación hacia el statu quo; hay ejercer controles ciudadanos para que no se llegue a la concentración o manejo de la rama judicial por parte de la presidencia o rama ejecutiva; que el equilibrio de poderes no se pierda, ni la independencia de las ramas del poder público; un síntoma de la eclosión autocrática se observa cuando intentan reformar el sistema electoral o penetran el sistema y dejan la apariencia de elecciones garantizadas pero ya han modificado las reglas de juego; el ejercicio de la oposición debe conducirse con racionalidad y proporcionalidad a lo que se determine desde el poder central, es decir oponerse a lo inconveniente con gradualidad y de manera oportuna para evitar los abusos del poder , una oposición bien enlazada o en estrecha relación con la población de todos los matices para contar con amplias bases populares.

No hacer una oposición irracional que niegue todos los cambios, conlleve a la inmovilidad y negación de los ascensos sociales, esto conduce a la polarización y la violencia; acudir a las elecciones sin perder espacios administrativos significativos que les abran campo a los autócratas.

Según el Instituto V-DEM de Gotemburgo (Suecia),hay 90 democracias y 89 autocracias en el mundo. Este dato es alarmante porque en el fondo las autocracias son dictaduras disfrazadas de democracias funcionales. “No obstante, 2.200 millones de personas, el 28 % de la población mundial, viven en autocracias cerradas como China, Irán, y Vietnam. Por otro lado, 44 % lo hace en autocracias electorales como India, Nigeria, Pakistán y Turquía.

Solo 14 países, que representan el 2 % de la población, muestran tendencias hacia la democracia. En los últimos dos años, nueve países se han convertido en autocracias cerradas: Afganistán, Irán, Myanmar, Haití, Chad, Malí, Guinea, Turkmenistán y Uzbekistán”. (Blücher López, 2023).

Rusia e Israel tienen autocracias cerradas, también. Son países de diferente origen, pero han llegado a esa situación. Rusia desde la descomposición de la URSS empezaron los cambios, y básicamente desde 1999 con el ascenso de Putin al poder; Israel con una coalición de extrema derecha gobernante y el autoritarismo de Netanyahu.

Cinco mandatos de coalición con las derechas, para ser Primer Ministro, hicieron que en el año 2023 Netanyahu formara con los ortodoxos una coalición de extrema derecha, iniciando reformas constitucionales para concentrar más poder y perfilar la autocracia, desdibujando la Democracia. Tiene procesos judiciales abiertos desde el año 2020 ante la Corte Suprema de Justicia.

La idea concebida era supuestamente fortalecer la relación entre las Rama Ejecutiva y el legislativo, pero desvanecer a la Rama Judicial, aminorándola para que no tenga injerencia en los controles del ejecutivo. Pretendía que el ejecutivo pudiera designar los jueces y desde el parlamento (Knesset) anular las decisiones de la Corte Suprema de Justicia. Netanyahu, inspirado en Viktor Orban, empotrado en el partido político Fidesz, gobernante autócrata de Hungría que formuló reformas para subyugar a los medios de comunicación, al sistema electoral y a los tribunales. La sociedad civil no toda contempla y celebra sus acciones , lo han demostrado durante los últimos 18 meses de reclamos y protestas en las calles.

Kenneth Roth, dentro de un análisis publicado el año 2021 afirmó que la autocracia estaba en ascenso y la Democracia en retroceso.

Citaba para ilustrar la afirmación, la represión contra voces opositoras en China, Rusia, Bielorrusia, Myanmar, Turquía, Tailandia, Egipto, Uganda, Sri Lanka, Bangladés, Venezuela y Nicaragua. Y agregó el surgimiento de líderes con ribetes autocráticos en democracias que estaban consolidadas como Hungría, Polonia, Brasil, El Salvador y Estados Unidos. En estos tres últimos se refería a Bolsonaro, Bukele y Donald Trump.

Putin es un dirigente ruso que lleva 24 años en el poder y aspira a continuar hasta el 2036 o sea 12 años más. Se le imputan fraudes electorales, cierre de la competencia democrática por la vía normal, ausencia de canales de participación política, la inexistencia de partidos políticos independientes, y practica una fuerte represión . Putin gobierna basado en el autoritarismo, ha suprimido el pluralismo, coartando las libertades políticas.

Ha limitado y suprimido el periodismo independiente, perseguido, encarcelado a las cabezas más visibles; ha limitado las organizaciones no gubernamentales, ha construido un régimen vertical donde el poder se ejerce desde la cúspide del líder intocable, donde la disidencia incómoda es hostigada y eliminada.

QOSHE - Autocracia, deformación de la Democracia - Alberto Ramos Garbiras
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Autocracia, deformación de la Democracia

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30.04.2024

Hay autocracias abiertas y autocracias cerradas, ambas deforman la Democracia. La Autocracia en situación larvada empieza con el autoritarismo o exceso de mando del gobernante.

Con el paso de los meses y ante más concentración del poder ese gobernante se puede enrutar hacia la autocracia. Los gobernantes transformados en autócratas pueden provenir de elecciones populares, o como outsider, o como el resultado de coaliciones multipartidistas. El autócrata puede resultar del populismo de derecha o del populismo de izquierda.

En un comienzo nadie avizora o calcula que ese nuevo gobernante que se transformara, a veces ni él mismo mide ni planea su transformación.

Son varios factores los que facilitan la mutación : la acumulación del poder, las circunstancias y sus aliados de ocasión, la economía boyante del país, las nuevas relaciones internacionales de coyuntura, la geopolítica y sus cambios, varios factores pueden propiciar la transformación.

Y existen autócratas que han perdido el poder, pero conservan el partido político que construyeron y quieren regresar al mando de la nación , para ello empiezan campañas de desestabilización premunidos del dinero que atesoraron y en alianza con los reductos del poder que subsisten dentro de las instituciones, de esta manera comienzan a fabricar lawfares y se encadenan con los medios de comunicación tradicionales, este poder mediático es el más contundente para desdibujar la imagen de quien quieren tumbar.

La Democracia mal entendida y mal manejada permite que aparezcan las autocracias porque los líderes de los partidos van perdiendo el horizonte del funcionamiento de gobiernos que se vuelven laxos, permisivos, corrompidos; dan mal ejemplo del manejo de la hacienda pública, la oposición la vuelven rencillas permanentes y descrédito del oponente y terminan todos desacreditados.

Le abren........

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