Cuba es una isla situada en el océano atlántico y se ubica estratégicamente en la entrada al golfo de México; es un país centroamericano que durante décadas se ha caracterizado por su forma de gobierno antiimperialista, república socialista marxista-leninista.
Desde la revolución cubana liderada por Fidel Castro en enero de 1959. Esta isla pasa a la historia por tener una forma de gobierno dictatorial que supera los 50 años en el hemisferio americano.
Mucho se puede decir de este país, sin embargo, hoy centraremos la atención para conocer el legado de un negro que se echó el ejercito libertador encima en procura de evitar que el país continuara bajo el yugo de los españoles.
La memoria histórica nos lleva al 14 de julio de 1845 cuando nace un negro a quien sus padres le llamaron Antonio Maceo y Grajales.
Su padre, Marcos Maceo, fue un mulato venezolano que prestó servicio en las fuerzas armadas realistas como soldado del Batallón de Leales Corianos que se batió contra las fuerzas patriotas al mando del general libertador Simón Bolívar. Ironías del destino, su padre luchó a favor de España y el hijo en contra de España.
Antonio Maceo conocido como el titán de bronce, inicia su carrera militar en procura de derrotar al ejército realista guiado por su señora madre quien desde niño le transmitió disciplina, estrategias militares y amor patrio.
Hoy procuraremos honrar el nombre de uno de los patriotas y guerreros más honorable y calificado de la historia de la isla cubana. El titán de bronce fue reconocido por su participación en la guerra de los 10 años, así como en la protesta moral en el pacto de zanjón y un aporte importante en la constitución de baragua.
Seguidamente se incorpora a la guerra necesaria de José Martí donde patentizó la carga de machete durante todo el periodo bélico.
Este afrodescendiente cubano se incorpora de lleno a la guerra de independencia cuando apenas tenía 23 años en el preciso momento que se proclama la república cubana con el reconocido grito de yara en 1868, al lado de su señor padre y algunos hermanos se alistó de inmediato en las fuerzas anti colonialistas; el primer ascenso fue cuando lo designan ayudante de Máximo Gómez; ese fue el primer peldaño que le da la oportunidad de escalar como un buen guerrero para luego ser aclamado como jefe de los insurrectos de las villas.
En el transcurso de la guerra de los 10 años logró la derrota de muchos frentes militares de los españoles en la loma de la gallega y la batalla de las guásimas lo que le permitió alcanzar el rango de mayor general.
El titán de bronce continúo combatiendo dominando ampliamente toda la provincia de oriente hasta el agotamiento de su ejército lo que le obligó exiliarse en Jamaica de donde siguió con la conspiración libertadora.
En 1895, junto a Flor Crombet y otros oficiales de menor rango, Maceo desembarcó en las inmediaciones de Baracoa (extremo oriental de Cuba) y luego de rechazar un intento español de capturarle o matarle, se internó en las montañas de esa región. Luego de muchas vicisitudes logró reunir un pequeño contingente de hombres, que rápidamente creció con los grupos ya alzados en armas en la región de Santiago de Cuba.
En la finca de La Mejorana, Maceo se entrevistó con Gómez y Martí, en lo que evidentemente fue una reunión desafortunada por los fuertes desacuerdos entre Martí y él respecto a la constitución de gobierno civil por la que Maceo no se pronunciaba a favor. Poco después el Héroe Nacional de Cuba (Martí) caería en combate en Dos Ríos (confluencia de Contramaestre y Cauto).
Maceo y Grajales recibió 27 heridas causadas con arma de fuego y arma blanca lo que en algunos momentos le obligó a retirarse del frente de combate en procura de hallar mejoría.
Se dice que incluso convaleciente y vendado motivaba a sus soldados para continuar la guerra entendiendo que no había que dar cuartel en un momento crucial que procuraba la independencia de España.
La lucha de Maceo no consistía solamente en la independencia; tenía otro objetivo el cual estaba relacionado con la abolición de la esclavitud; Maceo era consciente del avasallamiento, humillación y salvajismo a lo que eran sometidos los negros esclavizados que trabajaban día y noche en las plantaciones de caña de azúcar sin ninguna compasión.
El 7 de diciembre de 1896 el negro Maceo el titan de bronce muere en combate dejando un legado de amor patrio por la independencia y la abolición de la esclavitud en Cuba.
Antonio Maceo y Grajales, el titan de bronce
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29.02.2024
Cuba es una isla situada en el océano atlántico y se ubica estratégicamente en la entrada al golfo de México; es un país centroamericano que durante décadas se ha caracterizado por su forma de gobierno antiimperialista, república socialista marxista-leninista.
Desde la revolución cubana liderada por Fidel Castro en enero de 1959. Esta isla pasa a la historia por tener una forma de gobierno dictatorial que supera los 50 años en el hemisferio americano.
Mucho se puede decir de este país, sin embargo, hoy centraremos la atención para conocer el legado de un negro que se echó el ejercito libertador encima en procura de evitar que el país continuara bajo el yugo de los españoles.
La memoria histórica nos lleva al 14 de julio de 1845 cuando nace un negro a quien sus padres le llamaron Antonio Maceo y Grajales.
Su padre, Marcos Maceo, fue un mulato venezolano que prestó servicio en las fuerzas armadas realistas como soldado del Batallón de Leales Corianos que se batió contra las fuerzas patriotas al mando del general libertador Simón Bolívar. Ironías del destino, su padre luchó a favor de España y el........
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