La Historia de la Humanidad se ha ido desarrollando entre pandemias de todo tipo y guerras crueles, brutales e injustificadas. Por tanto, avisar de una nueva pandemia a corto o medio plazo (será un virus que afectará a las vías respiratorias como ha hecho el SARS-CoV-2) o una guerra mundial de efectos incalculables, no parece ningún disparate. Y eso es exactamente lo que nos están diciendo desde distintos puntos del planeta y de formas diversas.

Las autoridades sanitarias de medio mundo ya advierten de una nueva pandemia que llegará más pronto que tarde. La población mundial aumenta de forma exponencial, la invasión de hábitat que no nos corresponden nos colocan en situaciones de peligro invisible (bacterias y virus y a saber qué cosas más), el planeta se ha hecho muy pequeño y la movilidad de las personas es el mayor riesgo de propagación de enfermedades... Hemos construido un mundo en el que la peor plaga de todas debe ir desapareciendo para que el planeta logre salir adelante. Y la peor de las plagas somos los seres humanos. El equilibrio se terminará produciendo y eso significará que la población mundial se reducirá en gran medida (como ya ha pasado otras veces). Y todo esto no es nada nuevo; lleva pasando desde el principio de los tiempos.

Oficialmente, la Humanidad sólo ha sufrido dos guerras mundiales. Ya se sabía que el planeta es redondo y, efectivamente, gracias a la posibilidad de moverse por la Tierra que nunca antes habíamos tenido, los dos conflictos fueron mundiales. Pero en la antigüedad las guerras mundiales se sucedían sin solución de continuidad. Todos los pueblos conocidos, por unos y otros, se daban lo suyo cada cierto tiempo. Los universos eran muy pequeños por pura ignorancia. Ahora lo son justo por lo contrario. El caso es que las noticias que nos llegan de diferentes puntos del planeta son nefastas y muchas hablan de guerras ciertas, de guerras que están por llegar en poco tiempo, de situaciones que pueden ser la chispa que encienda la mecha de una guerra total. A un paso tenemos la de Putin contra Ucrania y la de Israel contra Hamas (contra toda Gaza y el pueblo palestino). Se puede organizar un follón muy importante en cualquier momento. De hecho, Reino Unido, Francia, Estados Unidos y algún país más ya han pedido a sus compatriotas que vuelvan a casa si viven en Líbano, Irak, Yemen y países limítrofes. La situación es muy inestable y un conflicto regional podría producirse en cualquier momento. Estamos a un paso de un conflicto armado de grandes dimensiones como siempre lo hemos estado.

Podría hablar de un sistema económico a punto de colapsar, de un cambio climático peligroso hasta el extremo o de los movimientos migratorios que desestabilizaran el mundo entero, pero eso sería meter el dedo en la llaga y estamos a las puertas de la Navidad. De momento, me quedo en lo de la pandemia y la Guerra Mundial. Total ya sería suficiente para que el mundo desapareciera tal y como lo conocemos.