Este domingo, Nayib Bukele fue “reelegido” como presidente de El Salvador. Su victoria se cantó antes de tiempo y el conteo de votos se demoró más de lo normal, pero, de todas formas, el “dictador más cool de Latinoamérica” dijo en su discurso de la noche que los resultados de las urnas eran reflejo de la voluntad del pueblo salvadoreño y que por eso su gobierno sí tiene legitimidad. Bukele tuvo que hacer esta aclaración porque es consciente de que su reelección es ilegítima, y peor, inconstitucional. El joven presidente ha tenido un control casi total del legislativo, y por esa vía eligió a sus aliados como ministros de la Corte Suprema, que a su vez emitió un rebuscado fallo para decir que podían pasarse por alto los seis artículos de la Constitución que prohíben la reelección. Bukele obtuvo alrededor de 1′600.000 votos en las urnas, pero nunca debió estar en el tarjetón. Llegó a participar en las presidenciales gracias a que destruyó la división de poderes en el país, por eso las elecciones del domingo fueron una parodia de la democracia.

La fórmula de Bukele no es nueva: vender seguridad para ganar indiferencia y hasta “permiso” para la violación de los derechos humanos de cierto sector de la población que se ha deshumanizado. Bukele trae la versión millenial, que incluye un manejo eficiente y muy inteligente de las redes sociales, pero es solo una solución aparente a un problema perpetuado por la misma solución. El crimen organizado genera inseguridad y miedo. El miedo hace que las personas voten por líderes autoritarios, que prometen seguridad a cambio de violaciones de derechos humanos. Las violaciones de derechos humanos crean desigualdad social y económica y necesitan contextos de impunidad. La desigualdad social y económica, sumada a la impunidad, hacen que el crimen organizado sea viable y hasta atractivo. El crimen organizado genera inseguridad y miedo… Es una serpiente que se muerde la cola, hasta el punto en que se engulle a sí misma y el Estado se convierte en una dictadura que se va a reír en tu cara cuando le reclames que cumpla su promesa de “seguridad”. En realidad, entregar la democracia a cambio de seguridad es un trato faustiano, porque funciona siempre que aceptes la premisa de que hay personas que son menos humanas, y luego de conceder esa premisa abres la posibilidad a que la persona deshumanizada seas tú.

“Sería la primera vez que en un país existe un partido único en un sistema plenamente democrático”, dijo Bukele en su discurso, pero no dejó espacio para que la audiencia se preguntara ¿por qué? Pues porque en un sistema verdaderamente democrático es imposible que haya un partido único. Y ahora el joven dictador se enfrenta a algunos problemas irresolubles, porque como dijo el periódico The Guardian: tener encarcelada al 1 % de la población es insostenible, la tasa de encarcelamiento más alta del mundo, y menos si el criterio para los arrestos es la aporofobia. Detrás de la fogata de vanidades lo cierto es que la economía está mal, y Bukele no pudo mejorarla en su primer periodo, durante el cual 200.000 personas cayeron en la pobreza extrema. Si las vidas de la gente se siguen precarizando ¿cuál es el plan de Bukele? ¿encarcelarles a todes? Puede hacerlo, pues un segundo periodo le permite tener un autoritarismo más descarado: la promesa de un camino nuevo para llegar a las dictaduras de siempre.

QOSHE - El dictador más cool de Latinoamérica - Catalina Ruiz-Navarro
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El dictador más cool de Latinoamérica

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08.02.2024

Este domingo, Nayib Bukele fue “reelegido” como presidente de El Salvador. Su victoria se cantó antes de tiempo y el conteo de votos se demoró más de lo normal, pero, de todas formas, el “dictador más cool de Latinoamérica” dijo en su discurso de la noche que los resultados de las urnas eran reflejo de la voluntad del pueblo salvadoreño y que por eso su gobierno sí tiene legitimidad. Bukele tuvo que hacer esta aclaración porque es consciente de que su reelección es ilegítima, y peor, inconstitucional. El joven presidente ha tenido un control casi total del legislativo, y por esa vía eligió a sus aliados como ministros de la Corte Suprema, que a su vez emitió un rebuscado fallo para decir que podían pasarse por alto los seis artículos de la Constitución que prohíben la reelección. Bukele obtuvo alrededor de 1′600.000 votos en las urnas,........

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