Debería estar hablando del Universo. Apenas hace una semana el equipo del Instrumento Espectroscópico de Energía Oscura (DESI) presentó el mapa tridimensional del universo más grande jamás construido. Una colaboración de más 450 investigadores (incluyendo al colombiano Jaime Forero de la Universidad de los Andes) participaron en el análisis de las observaciones de más de seis millones de galaxias registradas durante cinco años con un telescopio robótico en el Pico Kitt, la montaña sagrada Iolkam Du’ag para la Nación Tohono O’odham, en Arizona, Estados Unidos. Pero en Colombia, la masa casi nunca está para arepas ni para mapas del universo, sobre todo cuando los nubarrones que no llenan nuestros embalses se acumulan sobre el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación.

El escenario fue el debate de control político convocado por la representante Jennifer Pedraza. La ministra de Ciencias, Ángela Yesenia Olaya, debía responder a las denuncias de acoso laboral presentadas por el sindicato de trabajadores del ministerio. También debía explicar las irregularidades encontradas en las convocatorias para financiar iniciativas de negocios relacionados con la ciencia, la tecnología y la innovación, que terminaron administradas por quienes no sabían nada sobre ninguna de las tres.

Los cargos directivos en el ministerio de Ciencia duran menos que los técnicos de los equipos coleros del campeonato de fútbol. La Dirección de Capacidades y Apropiación del Conocimiento ha tenido cinco directores desde mayo de 2023. La Dirección de Gestión de Recursos ha tenido cinco en ese mismo período. Por la Dirección Administrativa y Financiera han pasado cuatro. En la Dirección de Talento Humano, tres. La oficina asesora de comunicaciones ha tenido cuatro jefes desde la llegada de la ministra Olaya. Sin embargo, lo que trascendió no fueron sus respuestas ni sus explicaciones sobre por qué el Ministerio de Ciencias tiene el presupuesto más bajo en 25 años y escasamente lo utiliza en la ejecución de proyectos. Nos quedamos con las presuntas irregularidades en la hoja de vida con la que la accedió a su cargo, escaso consuelo mientras la institución que administra se cae a pedazos

Si comparamos a la ciencia en su conjunto con el fútbol, Colombia está al nivel de la selección de Cabo Verde. ¿Han visto a Cabo Verde en los principales torneos internacionales? Así es Colombia en ciencia. Sin embargo, siendo uno de los países con mayor biodiversidad del planeta, tiene un enorme potencial para el desarrollo de las ciencias biológicas y sorpresivamente continúa produciendo científicos y científicas destacados individualmente a nivel mundial en medicina, ingeniería, química y física, eso que algunos analistas llaman “ciencias duras”, como si las demás fueran blanditas o quienes nos dedicamos a las ciencias naturales fuéramos aguacates sin madurar.

En Colombia, las vocaciones científicas siguen apareciendo casi por generación espontánea. Se nutren gracias a quienes, ante la ausencia de una política nacional de desarrollo científico, se niegan a aceptar que nuestra esquina del planeta se quede rezagada de la vanguardia del conocimiento. No dejo de cruzarme por el mundo con estudiantes colombianos que no tienen nada que envidiar en su formación a otros del primer mundo. Como en el caso de nuestros atletas de élite, los países desarrollados están encantados en recibir nuestro talento científico mientras que, sin apoyar ni entender lo que hemos construido, los responsables de las políticas públicas en Colombia amenazan a la gallina de los huevos de oro. ¿Por cuánto tiempo más produciremos científicos si, parafraseando a Kurt Vonneguth, para quienes nos gobiernan hacer políticas de ciencia y pensar el destino de Colombia parece incompatible con saber cómo funciona una nevera? En el cercano futuro de la robótica, la inteligencia artificial y la transición energética seguro los vamos a extrañar.

QOSHE - ¿Quién habla en nombre de la ciencia? - Juan Diego Soler
menu_open
Columnists Actual . Favourites . Archive
We use cookies to provide some features and experiences in QOSHE

More information  .  Close
Aa Aa Aa
- A +

¿Quién habla en nombre de la ciencia?

12 36
12.04.2024

Debería estar hablando del Universo. Apenas hace una semana el equipo del Instrumento Espectroscópico de Energía Oscura (DESI) presentó el mapa tridimensional del universo más grande jamás construido. Una colaboración de más 450 investigadores (incluyendo al colombiano Jaime Forero de la Universidad de los Andes) participaron en el análisis de las observaciones de más de seis millones de galaxias registradas durante cinco años con un telescopio robótico en el Pico Kitt, la montaña sagrada Iolkam Du’ag para la Nación Tohono O’odham, en Arizona, Estados Unidos. Pero en Colombia, la masa casi nunca está para arepas ni para mapas del universo, sobre todo cuando los nubarrones que no llenan nuestros embalses se acumulan sobre el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación.

El escenario fue el debate de control político convocado por la representante Jennifer Pedraza. La ministra de Ciencias, Ángela Yesenia Olaya, debía responder a las denuncias de acoso laboral........

© El Espectador


Get it on Google Play