La salida de Danilo Rueda como comisionado de Paz es el reconocimiento del absoluto fracaso de la ‘paz total’. Un modelo montado en la soberbia e inexperiencia de un equipo que, lejos de haber avanzado, está haciendo trizas lo ganado en el Acuerdo de Paz.
La no asistencia del Presidente a la conmemoración del acuerdo es más que simbólica y demuestra que tras 15 meses de gobierno el compromiso está en el discurso, pero no existen avances en los territorios. La ineficiente ejecución de los recursos de la paz conlleva el anquilosamiento de la ruta de reparación colectiva.
La primera decisión funesta fue la eliminación de la Alta Consejería para el Posconflicto. Esta determinación mostró el nulo interés del Gobierno en continuar la implementación del acuerdo para reemplazarlo por el globo de la ‘paz total’. Las consecuencias de tal decisión han sido catastróficas, como lo señaló el propio Rodrigo Londoño cuando advirtió que hasta el momento van más de 400 asesinatos, a los cuales deben sumarse los continuos desplazamientos causados por las amenazas que se han hecho a los desmovilizados por las disidencias.
La segunda decisión errónea fue iniciar 7 negociaciones al mismo tiempo, con el Eln, las disidencias de ‘Iván Mordisco’ y la ‘Nueva Marquetalia’ (que ya habían traicionado el primer acuerdo y no puede dárseles estatus de actor político), el ‘clan del Golfo’, las ‘Autodefensas Gaitanistas’ y los procesos locales en Buenaventura y la costa Atlántica, generando en todos los casos desprotección de la población civil e inseguridad.
La tercera ha sido la generación de ceses del fuego sin condiciones. La crisis en el cañón del Micay, lo de El Plateado, las amenazas a De la Calle le confirmaron a la opinión pública que el cese del fuego es solo la entrega de los territorios a los grupos armados, sin ninguna condición. En el cese los grupos armados consolidaron su poder. Se reportaron 57 incumplimientos del cese del fuego y 91 del cese de hostilidades contra la población civil en los departamentos de Cauca, Caquetá, Nariño, Chocó y Putumayo.
El caos total. Según cifras de la Unidad de Víctimas, entre el 1.º de enero y el 31 de agosto de 2023 se registraron más de 99.000 eventos de desplazamiento forzado y, como lo señaló el 'Financial Times', “los secuestros han aumentado más del 80 % bajo el presidente izquierdista Gustavo Petro, la extorsión ha aumentado un 27 %”, desmoronando el plan de ‘paz total’.
Si algo está demostrado del proceso de paz del gobierno Santos es que en ese momento el solo inicio de las negociaciones disminuyó considerablemente los ataques a los civiles. En agosto de 2016 (antes de la firma del Acuerdo Final y todavía en el proceso de negociaciones), el Cerac informó: “Acciones ofensivas de las Farc: cayeron un 98 %. Combates Fuerza Pública-Farc: se redujeron en un 91 %. Muertes civiles: caen un 98 %”. La situación era diferente al caos actual: en la mesa de La Habana se pactó desde el comienzo que la condición para avanzar era el desescalamiento del conflicto y, sobre todo, la reducción sustancial de hechos contra civiles. Ahora la situación ha sido distinta. Ante negociadores débiles y sin experiencia, los grupos armados han hecho lo que les da la gana.
Al final, la salida del Comisionado de Paz demuestra lo que era un secreto a voces, la ‘paz total’ es un caos total, sin rumbo ni procedimiento, y que Danilo parecía más un agente de los delincuentes que del Gobierno y por eso fracasó.
P. D. La fotografía del Presidente con los empresarios es una luz de esperanza. La contribución del sector privado al crecimiento y al desarrollo económico de un país está determinada por la manera en que el Gobierno entienda su rol. Colombia requiere con urgencia alcanzar un consenso que reactive la economía y genere una sociedad más equitativa. El camino es trabajar como aliados, nunca como enemigos.
LUIS FELIPE HENAO
(Lea todas las columnas de Luis Felipe Henao en EL TIEMPO, aquí)
Danilo fracasó
7
0
27.11.2023
La salida de Danilo Rueda como comisionado de Paz es el reconocimiento del absoluto fracaso de la ‘paz total’. Un modelo montado en la soberbia e inexperiencia de un equipo que, lejos de haber avanzado, está haciendo trizas lo ganado en el Acuerdo de Paz.
La no asistencia del Presidente a la conmemoración del acuerdo es más que simbólica y demuestra que tras 15 meses de gobierno el compromiso está en el discurso, pero no existen avances en los territorios. La ineficiente ejecución de los recursos de la paz conlleva el anquilosamiento de la ruta de reparación colectiva.
La primera decisión funesta fue la eliminación de la Alta Consejería para el Posconflicto. Esta determinación mostró el nulo interés del Gobierno en continuar la implementación del acuerdo para reemplazarlo por el globo de la ‘paz total’. Las consecuencias de tal decisión han sido catastróficas, como lo señaló el propio Rodrigo Londoño cuando advirtió que hasta el momento van más de 400 asesinatos, a los cuales........
© El Tiempo
visit website
login
who are we?
contact us
qosheapp
Toi Staff
Gideon Levy
Belen Fernandez
Andrew Mitrovica
Mort Laitner
Ali Fathollah-Nejad
Rami G Khouri
Nikkei Editorial
