Durante la búsqueda del bienestar emocional, el perdón juega un papel clave. Esta experiencia —además de ser subjetiva— implica transformar emociones y cogniciones negativas, como la rabia o el deseo de venganza, en otras más positivas, como la compasión, la solidaridad y la empatía. También adquiere un rol importante para prevenir problemas de salud: la actividad cerebral vincula las emociones negativas con una respuesta inmunitaria más baja y, con ello, una mayor vulnerabilidad ante enfermedades infecciosas.

¿Cómo aprendemos a perdonar o perdonarnos? No es una tarea fácil e implica una actitud reflexiva, humildad, generosidad y amor propio. Al perdonar no se espera nada a cambio. Es un proceso que lleva tiempo, por lo que la paciencia es clave y se torna necesario entender el punto de vista de los demás y empatizar con los sentimientos del otro. También se requiere valor para enfrentar el dolor, la firme voluntad y la decisión de perdonar.

A menudo, en los casos en los que se requiere perdonar —como aquellos de violencia en pareja o los vividos por la población víctima del conflicto armado— se acude a una serie de pasos aplicables que facilitan el proceso. Primero, la persona que cometió el agravio pide disculpas, manifiesta su arrepentimiento y ofrece garantías de no repetición. La persona afectada hace luego el ejercicio de recordar los eventos violentos, reconoce los sentimientos que le generan y se coloca en el lugar del agresor para entender su punto de vista y las condiciones en las que se encontraba cuando ocasionó la afectación. Finalmente, se busca que la persona agraviada se comprometa a realizar un proceso de perdón, manteniendo esta decisión sin pretender olvidar los eventos ocurridos.

Esta terapia psicológica en la que se aprende a perdonar no solo es válida cuando lo hacemos con otras personas, sino también cuando lo hacemos con nosotros mismos. Se trata en este caso de abandonar el auto resentimiento luego de haber cometido un error y darle paso a la autocompasión y a la reconciliación. Dejar atrás el pasado para emprender un futuro mejor y aprender a evitar nuevos comportamientos que nos lastimen es resultado del auto perdón, una de las herramientas más útiles para motivar nuestro desarrollo personal.

“El perdón no cambia el pasado, pero amplía el futuro” solía decir Paul Boese para recordarnos que la trascendencia del perdón radica en que, aunque no podamos cambiar lo sucedido, el acto de perdonar es sanador y abre nuevas posibilidades para lo que nos depara.

Las opiniones aquí expresadas no comprometen a la UTB ni a sus directivos.

*Profesora del programa de Psicología, UTB.

QOSHE - El perdón y el bienestar emocional - Elsy Domínguez De La Ossa
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El perdón y el bienestar emocional

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24.11.2023

Durante la búsqueda del bienestar emocional, el perdón juega un papel clave. Esta experiencia —además de ser subjetiva— implica transformar emociones y cogniciones negativas, como la rabia o el deseo de venganza, en otras más positivas, como la compasión, la solidaridad y la empatía. También adquiere un rol importante para prevenir problemas de salud: la actividad cerebral vincula las emociones negativas con una respuesta inmunitaria más baja y, con ello, una mayor vulnerabilidad ante enfermedades infecciosas.

¿Cómo aprendemos a perdonar o perdonarnos? No es una tarea fácil e implica una actitud reflexiva, humildad, generosidad y amor propio. Al perdonar........

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