Decía Miguel Ángel que sus esculturas estaban dentro del mármol y solo hacía falta liberarlas de la piedra que sobraba para que pudiesen lucir.

Podríamos trasladar esta idea al trabajo realizado por el carballiñés Roberto Cibeira desde su llegada a la presidencia del Básquet Coruña. El conjunto herculino no es líder en solitario y candidato al ascenso a la Liga ACB por casualidad, sino merced a la continuidad de un proyecto al que ha ido dando forma y que se ha visto reafirmado en su paso por el Pazo. Eso sí, con más apuros de lo esperado, y con una prueba definitiva en la jornada de mañana, recibiendo en la cancha de Riazor al Tizona Burgos de otro relevante ourensano en el mundo de la canasta, Diego Ocampo.

Éxito de ellos y mérito de un COB, capaz de reaccionar y poner contra las cuerdas a un dominante Coruña, merced a una exhibición de ánimo y firmeza defensiva para reivindicarse y reclamar su sitio en el play off. Como bien dijo el escritor y jugador de poker Jack London: “La vida no es siempre cuestión de tener buenas cartas, sino a veces, de jugar bien una mala mano”. Y esto fue lo que hizo Félix Alonso en la conducción del COB. La verdad es que Basket Coruña y COB disputaron un partido para ennoblecer el basket.

Valoración de un COB en la que la dupla Turner/Kacinas - recuerdan Andres Montes, “albañilería, fontanería, electricidad... 24 horas a su servicio... Harper asociados”- ya es imagen y bandera -¿Tendrá continuidad?- ante un tramo final de la Liga con partidos al límite.

Ante una batalla en la que el mínimo ajuste se eleva al máximo. Donde los resultados llegaran o no, porque a fin de cuentas la plantilla es la que es, si la comparamos con el resto de equipos con los que compite en la disputa por alcanzar el play off, y eso se ve reflejado en una eficiencia menor en algunos aspectos del ataque, pero que se ve compensado con el trabajo y la intensidad que aporta el Pazo en los partidos como local. Y como esto va muy de de prisa a la vuelta de la esquina hay viaje hasta Alicante, otra de las plazas importantes, para a continuación recibir en el Pazo al Cantabria. Otra gran tarde.