Hoy, ya lo sabes, es la noche de ánimas y se juntan todas aquí y allá para cantar canciones viejas con sus voces quebradas. Oh, ú, ah.

Si lo piensas bien, te descubres siempre como un niño que se ha perdido. No pocas veces te tropiezas. Vas dando tumbos. No has hecho otra cosa, desde siempre, que andar, interpretar las huellas.

A veces en ese bosque en el que vives caminando siempre, descubres un hombre viejo con barba larga y te avisa de que en cualquier momento se abrirá la tierra bajo tus pies, estos pies de chico, y se te comerá los huesos, los sueños, las ilusiones y los proyectos. Y le protestas al profeta, al carpintero viejo y se marcha riéndose porque es un sabio y sabe que cuanto te vaticina, es cierto.

Hoy, ya lo sabes, es la noche de ánimas y se juntan todas aquí y allá para cantar aquellas canciones viejas que aprendieron de los borrachos en las tabernas. Oh, ú, ah.

Desde que nos expulsaron del paraíso, todos somos, créeme, unos niños perdidos y caminamos hacia no sé dónde. Pero el hombre viejo sí lo sabe y sonríe. Caminar desconcertados, es una pena que nos traspasa y nos abarca. Míranos cómo caminamos más que errados, viajamos sin mapas, transitamos un rato por esta fronda y espesura…para caernos en una zanja que ha cavado el viento y ya no seremos nada.

Y preguntarán: Quién era ese y nadie responderá porque nadie sabrá nada. Porque todos somos caminantes desnudos para ser tapados por una sábana blanca a la que llamarán mortaja. Cuando lleguen las noches bramando en la arboleda y la niebla se ponga a volar muy baja, golpeará la ventisca contra la espadaña. Y ella resistirá indómita, agreste, selvática. Mientras nosotros ya no estaremos aquí para mirarla.

Hoy, ya lo sabes, es la noche de ánimas y se juntan todas aquí y allá para oler con sus narices viejas las coronas florales que tú les regalas. Oh, ú, ah.

Ahora veo otro hombre, desnudo como nosotros, asustado como nosotros, golpeado como nosotros. Le vemos subido a aquel árbol que han plantado en la cima de la colina, allá en la montaña. Le pregunto quién eres y me dice que ahora apenas nada, como tú, sólo un joven que caminaba, como tú, un niño que se perdía, como tú, a la espera de que le encontrara su madre, como tú, o José el de la barba larga.

Los árboles gigantes que le miran con sus ojos de mirar las nubes, no le reconocen como suyo. Suya puede ser la lluvia que los moja de arriba abajo, el canto de los pájaros, el estallido de la secuoya cuando la parte el viento y se rompe inesperada.

Y me da pena de que se nos muera tan joven, tan maltratado, tan escarnecido y de que lo envuelvan, a él también, en un papel de estraza.

Y un ángel de alas albas doblará la sábana de lino, la suya y la nuestra para guardarlas, porque vendrán, más tarde, otras mujeres y hombres que caminarán su propio bosque, y necesitarán llegar a la cima de la montaña, esa en la que Dios, hecho hombre, crucificado en una estaca, como un cualquiera, nos enseñará que el camino, aunque parezca que nos lleva a la nada, nos está conduciendo al lugar donde guarda el Padre, desde hace miles de siglos, la esperanza.

Hoy, ya lo sabes, es la noche de ánimas y se juntan todas aquí y allá. Y esa infinidad de ánimas palabrean dulcemente para explicarte que la vida es sólo ese instante en el que amas. Oh, ú, ah.

QOSHE - Papel de estraza - Plácido Blanco Bembibre
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Papel de estraza

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05.11.2023

Hoy, ya lo sabes, es la noche de ánimas y se juntan todas aquí y allá para cantar canciones viejas con sus voces quebradas. Oh, ú, ah.

Si lo piensas bien, te descubres siempre como un niño que se ha perdido. No pocas veces te tropiezas. Vas dando tumbos. No has hecho otra cosa, desde siempre, que andar, interpretar las huellas.

A veces en ese bosque en el que vives caminando siempre, descubres un hombre viejo con barba larga y te avisa de que en cualquier momento se abrirá la tierra bajo tus pies, estos pies de chico, y se te comerá los huesos, los sueños, las ilusiones y los proyectos. Y le protestas al profeta, al carpintero viejo y se marcha riéndose porque es un sabio y sabe que cuanto te vaticina, es cierto.

Hoy, ya lo sabes, es la noche de ánimas y se juntan todas aquí y allá para cantar aquellas canciones........

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