La dicotomía clásica sería entre civilización y barbarie, una idea que precisamente hoy, día de segunda vuelta electoral en Argentina, puede resultar pertinente.
Facundo, que es como se suele conocer el libro, es una mezcla de libelo contra el general Rosas, ensayo que se pretende de altos vuelos y novela histórica que Sarmiento –Domingo Faustino Sarmiento– publicó en 1845, durante su segundo exilio político en Chile. Civilización y barbarie fue el título original del libro. Subtitulado pomposamente Vida de Juan Facundo Quiroga. Aspecto físico, costumbres y ámbitos de la República Argentina.
Un manifestante por la unidad de España ayer en Madrid
Sin entrar en precisiones, el libro se inscribe en las guerras civiles argentinas entre unitarios y federales, estos últimos partidarios de la autonomía feroz de las provincias. Facundo fue eso mismo, un caudillo federal, apodado el Tigre de los Llanos. Un general a caballo, de maneras y modos gauchescos. Y, para Sarmiento, el modelo que desterrar de la vida política y social argentina. Sí, no solo nuestros carlistas eran regionalistas y reaccionarios a la vez. Sarmiento, que llegó a ser presidente de Argentina durante seis años, ve la civilización como la forma de vida propia de Buenos Aires, la ciudad europea, con gente educada y cortés, contrapuesta a la barbarie de los gauchos y los campesinos analfabetos. Francia y su herencia son la civilización y el progreso. España es el atraso, anclada como está tan cerca de África. No es de extrañar que el Facundo, libro alabado por Borges, tuviese pronto buena acogida en Francia y en ediciones inglesas.
La barbarie es el caudillo, el alzamiento, la violencia, pero sobre todo la ignorancia. Sarmiento, por otro lado, no dudaba en preconizar que había que exterminar al indio. Y que para llegar a ser civilizados había que matar a todos los salvajes.
En fin, todo esto para decirles que la cuestión territorial y la integración del gran Buenos Aires con las extensas provincias sigue siendo un tema argentino, que, pese a su muy notable nacionalismo y fervor patriótico, continúa empantanado en aguas no demasiado claras.
En España, tras lo que hemos visto en la doble sesión de investidura, la cosa está más bien entre federalismo o barbarie. La cuestión territorial, de nuevo. Y su utilización partidista.
¿Por qué o federalismo o barbarie? En primer lugar, porque este Estado casi federal debería organizarse de forma definitivamente federal, con lealtad de las autonomías al Gobierno central y viceversa. Porque no puede ser que lo que en el mundo civilizado es una solución: el federalismo, en España sea visto como un problema.
Claro está que para una reforma federal de calado se necesita el acuerdo de los dos grandes partidos, a ser posible con un consenso todavía mayor que resuelva temas como la segunda Cámara, la financiación, el mapa definitivo de competencias y obligaciones de solidaridad y demás. Casi todo el mundo sabe de lo que debería hablarse, pero en lugar de hacerlo se elige la barbarie, se excitan las peores y más bajas pasiones y se fomenta la bandería y el tumulto.
En esta España que unos perciben hoy como a la vez roja y rota, la barbarie empieza a tener visos de revuelta y algarada. Y no hay jaculatoria ni rezo del rosario que consigan disimularlo. Y, sin embargo, si abandonásemos nostalgias imperiales o el sueño de ser franceses –tan cerca y tan lejos–, así como la quimera de una independencia decimonónica, hay futuro y convivencia. En clave federal.
Federalismo o barbarie
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19.11.2023
La dicotomía clásica sería entre civilización y barbarie, una idea que precisamente hoy, día de segunda vuelta electoral en Argentina, puede resultar pertinente.
Facundo, que es como se suele conocer el libro, es una mezcla de libelo contra el general Rosas, ensayo que se pretende de altos vuelos y novela histórica que Sarmiento –Domingo Faustino Sarmiento– publicó en 1845, durante su segundo exilio político en Chile. Civilización y barbarie fue el título original del libro. Subtitulado pomposamente Vida de Juan Facundo Quiroga. Aspecto físico, costumbres y ámbitos de la República Argentina.
Un manifestante por la unidad de España ayer en Madrid
Sin entrar en precisiones, el libro se inscribe en las guerras civiles argentinas entre unitarios y federales, estos últimos partidarios de la autonomía feroz de las provincias. Facundo fue eso........
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