Hay mujeres fuertes, que saben defenderse del mundo. Son de naturaleza algo pirata, se contradicen, cometen errores, pero aprenden a sobrevivir. Hace poco la cantante Rosalía rompió moldes con su actuación en los Grammy Latinos en Sevilla. Hizo una versión aflamencada y magnífica de una canción que tiene historia. Fue una forma de hablar del desamor que le ha tocado vivir. Ya sabemos que los poemas pueden ser autobiográficos y también terapéuticos. Sirven para curar heridas del alma. Rosalía versionó una canción que cantaba Rocío Jurado, Se nos rompió el amor.

Me gustaba por su intensidad, su apasionamiento, la teatralidad con la que Rocío Jurado la escenificaba: ese desgarro, pura imagen del dolor. Ella también tenía ­problemas en su matrimonio por aquel entonces.

Rosalía hizo una versión con cambios en la letra adaptándola a su estilo musical. Estaba espléndida con un vestido del diseñador Schiaparelli que se inspiraba en el famoso “vestido de la venganza” de lady Di, estrenado justo después de su divorcio y diseñado para pisar fuerte e intentar renacer. Era un diseño largo y negro con un escote desafiante para enfrentarse a los focos. Había que levantar cabeza. Cuando algo tan duro como la pérdida se convierte en música, siempre ganamos. Es aquello tan simple de que, si nos dan limones, hacemos limonada.

Responder al desamor con música es no rendirse al desaliento. Shakira también lo hizo así. Con mucha menos elegancia que Rosalía, cantó temas que explicaban la rabia del abandono. Su historia de amor se aireó a los cuatro vientos. Entonces decidió sacar partido de la situación: “Las mujeres no lloran, las mujeres facturan”, repetía en los escenarios. Era una reivindicación de la mujer que se empodera, capaz de convertir la derrota sentimental en euros.

Evidentemente no todas las mujeres del mundo tienen el privilegio de facturar cuando su pareja se va con otra. Eso es falso. La mayoría solo pueden resignarse. Sin embargo, la actitud de Shakira se convirtió en un canto de autoengaño y esperanza, consolador para muchas. Ahora la cantante acaba de llegar a un pacto con Hacienda, maldiciendo probablemente su vida en Barcelona, ya que ha vuelto a catapultarse entre los cantantes que más facturan.

Shakira me recuerda el caso de Lola Flores. Una mujer conocida como la Faraonaparece tener que estar por encima de cualquier amenaza terrenal, pero nadie escapa de Hacienda. Corrían los años ochenta cuando se le impuso una multa de 140 millones de pesetas (más de 841.000 euros) y una pena de prisión. Lola, que era un personaje capaz de montar espectáculos más allá de los escenarios, se dirigió a los españoles desde la pantalla de la tele. Pedía que cada español le diese una peseta. Así sumaría una parte de la cantidad debida. Ella, que se identificaba con el apodo de Lola de España se autodenominó en aquel momento Lola de Hacienda.

Aunque el caso acabó sin pena de prisión y con una reducción de la deuda, nunca olvidó que la habían sentado tres días en el banquillo de los acusados como a una vulgar delincuente. Me encantaba la pasión que le desbordaba por los poros, su talento al cantar y aquel convencimiento profundo e ingenuo de ser amada por España entera.

QOSHE - Mujeres que la lían - Maria De La Pau Janer
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Mujeres que la lían

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24.11.2023

Hay mujeres fuertes, que saben defenderse del mundo. Son de naturaleza algo pirata, se contradicen, cometen errores, pero aprenden a sobrevivir. Hace poco la cantante Rosalía rompió moldes con su actuación en los Grammy Latinos en Sevilla. Hizo una versión aflamencada y magnífica de una canción que tiene historia. Fue una forma de hablar del desamor que le ha tocado vivir. Ya sabemos que los poemas pueden ser autobiográficos y también terapéuticos. Sirven para curar heridas del alma. Rosalía versionó una canción que cantaba Rocío Jurado, Se nos rompió el amor.

Me gustaba por su intensidad, su apasionamiento, la teatralidad con la que Rocío Jurado la escenificaba: ese desgarro, pura imagen del dolor. Ella también tenía ­problemas en su matrimonio por aquel entonces.

Rosalía hizo una........

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