El dilema entre fabricar mantequilla o cañones formulado por el economista Paul A. Samuelson explica las opciones de producción de una sociedad para satisfacer la demanda. Una versión anterior del jerarca nazi Hermann Göring resumía la tesis en “los cañones nos harán más fuertes; la mantequilla, más gordos”. Al simplismo de Göring, Samuelson ofrecía vías intermedias para invertir en defensa sin desmantelar el Estado de bienestar. Pero, en esencia, el interrogante planteado el siglo pasado es el mismo al que ahora se enfrenta Europa. Cañones para reforzar el pilar militar o mantequilla para sostener la red de protección social.

Donald Trump en la 28.ª cumbre de la OTAN

Dos factores convergen en la urgencia de decidir, la agresividad imperialista de Rusia y el previsible aislacionismo norteamericano. Putin se regodea ante las expectativas de la guerra en Ucrania y afianza su matonismo amenazando a sus vecinos bálticos, al tiempo que Trump promete acabar con la subvención norteamericana que mantiene el balneario europeo. En el peor momento de Europa desde la Segunda Guerra Mundial, Trump amenaza con cerrar el paraguas protector a “los delincuentes” que no contribuyan con el 2% de su PIB al pacto atlántico, es decir para la mayoría de los integrantes, incluida España, que aporta un 1,26%.

Así las cosas, el costo de oportunidad se decanta peligrosamente hacia los cañones en detrimento de la mantequilla. Porque ni doblando la inversión en defensa de los países que forman el pilar europeo de la OTAN se compensarían las decenas de miles de soldados estacionados en el continente ni se supliría la aportación tecnológica norteamericana. Por tanto, si Washington cierra el grifo, la exposición de Europa a un zarpazo de Rusia y su capacidad para rechazarlo aumentarían exponencialmente. Cierto, sin Trump en la Casa Blanca, la hipótesis es menos alarmante. Pero la incertidumbre y el riesgo que corre Europa es tan grave que se impone pensar en lo impensable y construir con urgencia un sistema de defensa propio, sin la tutela de EE.UU., capaz de afrontar los desafíos que acechan.

Para seguir untando el pan con algo de mantequilla, quizás ahora toca llenar los arsenales de cañones.