Entre las fiebres aturdidoras de la gripe A se me colaban estos días guiños luminosos de mensajes que ni era capaz de abrir. Y al verlos juntos ayer, sobre todo aquellos más deliciosamente inesperados, me dio por considerar cuántas vidas nos tocan y tocamos en el abrazo de un año. Cuántas personas nos hicieron cambiar, siquiera un poco, solo con oírles o leerles dos palabras o con sentir el heroísmo sonriente de su trabajo. Muchas. Tantas, que remontar las de nuestros años daría miedo, pero, gracias a Dios, es imposible. Nadie sabe a cuántas vidas ha afectado ni cuántas le han afectado directamente.

Llegó en estas el periódico y me lancé sobre la última pagina de Jorge Casanova, donde, como despedida, hacía recuento, precisamente, del medio millar de entrevistados que llevó a esa sección. El otro día, en el pincho de Navidad del periódico, me dijo que se jubilaba y me sentó fatal. Hasta me fui del lugar. Me pregunté por qué sentía que con su jubilación perdía tanto, si lo conocía poco y lo veía menos. Al leerle ayer me entendí mejor: le conocía y le quería más de lo que pensaba porque, además, le leía.

En la página de ayer da su respuesta a la pregunta que tantas veces hizo a sus interlocutores: ¿Qué es lo más importante en la vida? Como escritor consumado, juega muy bien sus cartas espejándose en opiniones ajenas y termina con una pincelada magistral: «Ahora que se me acaba el espacio voy a confesar que a todos hice esta pregunta para que reafirmaran lo que yo sé: que lo más importante en la vida es el amor; que sin amor todo funciona a medio gas y que no se vive si no se ama». Después agradece. Como un hombre. Feliz Año y feliz vida. Para Jorge Casanova y para todos.

QOSHE - Vida nueva - Paco Sánchez
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Vida nueva

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30.12.2023

Entre las fiebres aturdidoras de la gripe A se me colaban estos días guiños luminosos de mensajes que ni era capaz de abrir. Y al verlos juntos ayer, sobre todo aquellos más deliciosamente inesperados, me dio por considerar cuántas vidas nos tocan y tocamos en el abrazo de un año. Cuántas personas nos hicieron cambiar, siquiera un poco, solo con oírles o leerles dos palabras o con sentir el heroísmo sonriente de su trabajo. Muchas.........

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