PERRO NO COME CARNE DE PERRO

He aquí un refrán muy oído, pero al parecer ahora poco escuchado.

No todo el mundo puede saber lo que significa. Sin embargo, todo el mundo acepta que no está bien comerse a un semejante. Te llaman caníbal y además creo que te puede sentar mal, sobre todo si la carne está cruda.

Por tanto, recomiendo calma o la ingesta múltiple de ansiolíticos, antes de que la sangre, que se dice, llegue al río.

Alguna película tremendista, que ahora dicen llamarse “biopic”, u otros “documenta” l, ha puesto de moda oscariana el hecho de comerse a otro ante determinadas circunstancias. A lo mejor puede comprenderse.

Como liberal se supone que soy flexible y trato de comprenderlo todo…aunque evito el relativismo. No todo es relativo. Comerse a otro es poco relativo. Es radical, tendente a mal, además de poco elegante.

Quizás haya otras posibilidades.

Claro que ya es hora de aclarar que con el titular no me estoy refiriendo al apetito que precede, cuando puede ser, a la ingesta de alimentos sólidos o líquidos que calmen la hambruna física y elemental.

Hasta aquí digo. Conviene saber qué otra cosa es que el personal, en un arrebato de pasión sin medida, de imposibilidad hormonal incontenible – pese al “día de la dona” -señale a una señora desde un andamio o desde el volante de un Ferrari, con un: “estás para comerte” y en ese momento sea acusado de machista, comemujeres o asesino potencial.

La cosa está que arde en ese campo del apoderamiento.

De acuerdo no se trata de comerse físicamente a nadie.

¿Entonces de que se trata aquí?

Nada. De la campaña política -casi no podía ser de otro modo- montada a raíz de la difusión de las fotos de dos compañeros, de profesión periodística, que fueron a intentar aclarar algunos aspectos que tienen que ver con el asunto “Hacienda” contra “el novio” de la presidenta de la comunidad de Madrid, la Sra., Ayuso.

“¡Hacienda somos todos,” cuidao”! como ha dejado claro la Sra. Montero indicándolo con su mejor dedo parlamentario y hacendoso hace unas jornadas en el pleno ese en el que nunca se ponen de acuerdo en nada y si se insultan y amenazan tabernariamente para ejemplo de las venideras generaciones.

Se ve que fueron (al decir del Jefe del Gabinete de la presidenta el Sr MAR- Miguel Ángel Rodríguez, conocido por estar AL SERVICIO DE José María Aznar como responsable de prensa en su escalada hacia la Moncloa-) preguntando a unos e incluso a otros.

Calificado por el Sr MAR como acoso, se ha montado “un pollo” en el que todo el mundo de este oficio y otros-aprovechando el paso del Pisuerga por Valladolid (o sea ‘Aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid’. (usamos esta curiosa frase para indicar que vamos a hablar, o que alguien habla, de algo que no tiene nada que ver con lo que se está tratando) se ha apuntado para la búsqueda de titulares y para meterse, como ya es habitual, con al Sra., Ayuso, con su novio de antes, del de ahora, su piso, su tono y todo lo que sirva para el “derribo” de este “torete” que es como un grano, se ve, en el culo monclovita y aledaños.

Se ve que la cosa está en ver quien tiene más pelotas que el otro. Todos a una en el caso de la izquierda y todos a una en el caso de la derecha y entretanto el teatro político juega a hacer luz de gas, o sea, según el Diccionario de la real Academia, “’intentar que (alguien) dude de su razón o juicio mediante una prolongada labor de descrédito de sus percepciones y recuerdos’.

Té noto descreído me dice un propio. Ya. No te digo que sí, pero tampoco que no. Depende del día.

No es hora. Yo me voy a tomar un helado contraviniendo las sugerencias, prescripciones, órdenes de médicos, higienistas, fisioterapeutas y demás aconsejadores. Mejor eso que comer carne de perro. ¿No- Muy buenas

QOSHE - perro no come carne de perro - Carlos Pajuelo
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perro no come carne de perro

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01.04.2024

PERRO NO COME CARNE DE PERRO

He aquí un refrán muy oído, pero al parecer ahora poco escuchado.

No todo el mundo puede saber lo que significa. Sin embargo, todo el mundo acepta que no está bien comerse a un semejante. Te llaman caníbal y además creo que te puede sentar mal, sobre todo si la carne está cruda.

Por tanto, recomiendo calma o la ingesta múltiple de ansiolíticos, antes de que la sangre, que se dice, llegue al río.

Alguna película tremendista, que ahora dicen llamarse “biopic”, u otros “documenta” l, ha puesto de moda oscariana el hecho de comerse a otro ante determinadas circunstancias. A lo mejor puede comprenderse.

Como liberal se supone que soy flexible y trato de comprenderlo todo…aunque evito el relativismo. No todo es relativo. Comerse a otro es poco relativo. Es radical, tendente a mal, además de poco elegante.

Quizás haya otras posibilidades.

Claro que ya es hora de aclarar que con el titular no........

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