Todo en el atentado del auditorio Crocus de Moscú plantea preguntas que por ahora no tienen respuesta. Para empezar, es absurdo que, tras las advertencias de los Estados Unidos, que llegaron a aconsejar públicamente a sus conciudadanos no asistir a conciertos ni acudir a espectáculos de masas, la seguridad rusa no tomara ninguna precaución. Putin pudo desdeñar públicamente la advertencia norteamericana tachándola de "chantaje", pero luego, nada impedía adoptar unas discretas precauciones. Mucho más en un Estado policial, donde cualquier restricción a la libertad habría sido aceptada como natural sin necesidad de explicar por qué se imponía. En un país que además se encuentra en guerra, en el que el FSB mantiene vigilada a la totalidad de la población y en el que hay desplegados decenas de miles de delatores parece imposible poder preparar un atentado así impunemente. Extraña igualmente que los terroristas entraran en un recinto cerrado con fusiles de asalto sin que ninguno de ellos fuera detectado por los servicios de seguridad de la instalación. Más sorprendente aún es que los terroristas se mantuvieran dentro del teatro una hora entera disparando a los asistentes sin que la Policía llegara en ningún momento a obstaculizar su macabra misión. Y lo que ya es el remate es que los terroristas pudieran huir del lugar, tras una hora de carnicería, en un automóvil sin que ninguna fuerza acertara a impedírselo. Y es que, a diferencia del atentado del Estado islámico en Irán en enero pasado, del que también advirtió Washington a Teherán sin que los ayatolás hicieran el más mínimo caso, fue con terroristas suicidas, que en Moscú sin embargo no ha habido.

¿Quiere esto decir que el atentado lo organizó Putin? No sería la primera vez que el presidente ruso monta una operación de falsa bandera para justificar una reacción violenta. Existe hoy el generalizado convencimiento de que los ataques terroristas de septiembre de 1999, en los que murieron casi 300 personas, cuando Putin era tan sólo primer ministro, fueron organizados por el FSB para que sirvieran de pretexto a la segunda guerra chechena y le facilitaran al mandatario la victoria en las presidenciales del año siguiente. Tanto es así que, cuando uno de los artefactos no explotó y se vio que, por como estaba armado, había sido fabricado por el FSB, su director tuvo que decir que aquél no era la bomba de un atentado terrorista frustrado, sino que era parte de un ejercicio de entrenamiento de la agencia. Esta vez no parece que sea el mismo caso. Pero, no es descartable que, enterado Putin del propósito de la organización islamista, dejara hacer para que le fuera luego mas fácil emprender la segunda movilización de fuerzas que al parecer se propone y que le es indispensable para disponer de soldados suficientes con los que afrontar una gran ofensiva este verano.

Conforme pasa el tiempo está más claro que, una vez que a Moscú no le fue posible derrotar a Ucrania en unas pocas semanas tal y como el ejército ruso cándidamente había previsto, la guerra de desgaste en la que Putin ha sumido al país le viene bien para mantener bajo su bota al pueblo ruso. Y este atentado es una pieza más que ayuda a que los rusos lo soporten.

QOSHE - Las guerras de Putin - Emilio Campmany
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Las guerras de Putin

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27.03.2024

Todo en el atentado del auditorio Crocus de Moscú plantea preguntas que por ahora no tienen respuesta. Para empezar, es absurdo que, tras las advertencias de los Estados Unidos, que llegaron a aconsejar públicamente a sus conciudadanos no asistir a conciertos ni acudir a espectáculos de masas, la seguridad rusa no tomara ninguna precaución. Putin pudo desdeñar públicamente la advertencia norteamericana tachándola de "chantaje", pero luego, nada impedía adoptar unas discretas precauciones. Mucho más en un Estado policial, donde cualquier restricción a la libertad habría sido aceptada como natural sin necesidad de explicar por qué se imponía. En un país que además se encuentra en guerra, en el que el FSB mantiene vigilada a la totalidad de la población y en el que hay desplegados decenas de miles........

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