En el mundo hay 21 países que tienen por idioma el castellano. Pero únicamente dos, España y Argentina, consiguieron industrializarse, no sin incurrir en enormes sacrificios colectivos, durante algún momento de su historia. Ningún otro lo lograría jamás. Pero, no mucho después de haber consumado esa común hazaña, ambos, tanto España como Argentina, decidieron desmantelar alegremente sus respectivas industrias nacionales. En Argentina lo hizo el ministro Martínez de Hoz durante la dictadura de Videla. Y en España se ocupó de ejecutar el mismo trabajo Carlos Solchaga por encargo del PSOE. Desde aquel entonces, en España vivimos del turismo y en Argentina, de milagro.

Y como, salvo el turismo, aquí ya no queda prácticamente nada, la población lleva cuarenta años concentrándose en la costa mediterránea, casi el único territorio peninsular, amén de la isla de Madrid, donde la gente joven puede buscarse la vida. Dicho de otro modo: la mayor parte de los habitantes de la Península Ibérica tiende a habitar cada vez más en una pequeña franja costera a orillas del Mediterráneo cuya característica dominante remite a la escasez crónica de agua. Añádase a ello que el grueso de la población flotante integrada por los turistas extranjeros —algo más de 85 millones de frentes sudorosas y gargantas sedientas, en 2023— tiene como destino lúdico esa misma línea del litoral, y se comprenderá la dimensión dramática que está a punto de alcanzar el problema del agua para la economía nacional.

Si bien la culpa la tiene Franco. Sí, Franco. Suya es la culpa porque, igual que a Kruschev se le ocurrió un día la mala idea de regalar a la región soviética de Ucrania un territorio histórico de Rusia llamado Crimea, Franco cayó en la falta de previsión de no modificar la frontera provincial entre Tarragona y Castellón, la fijada por Javier de Burgos en 1833. Si lo hubiera hecho, el cauce del Ebro constituiría hoy la divisoria natural entre el País Petit y la Comunidad Valenciana, lo que hubiese "descatalanizado" la desembocadura del río y, en consecuencia, permitido el trasvase, toda vez que la Generalitat no se lo habría apropiado. Y ahora, a subirles el agua en barco a los señoritos desde Valencia.

QOSHE - Los dos errores de Franco y Kruschev - José García Domínguez
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Los dos errores de Franco y Kruschev

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05.02.2024

En el mundo hay 21 países que tienen por idioma el castellano. Pero únicamente dos, España y Argentina, consiguieron industrializarse, no sin incurrir en enormes sacrificios colectivos, durante algún momento de su historia. Ningún otro lo lograría jamás. Pero, no mucho después de haber consumado esa común hazaña, ambos, tanto España como Argentina, decidieron desmantelar alegremente sus respectivas industrias nacionales. En Argentina lo hizo el ministro Martínez de Hoz durante la dictadura de Videla. Y en España se ocupó de ejecutar el mismo........

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