Albert Montagut

Con el archivo del ‘caso Abidal’, que arbitraba una acusación de tráfico de órganos abierta en el Juzgado de Instrucción número 28 de Barcelona, se cierra la sexta causa contra el ex presidente del FC Barcelona Sandro Rosell.

Rosell ha visto cómo se archivaban una tras otra las diligencias abiertas contra él por blanqueo de capitales y organización criminal, descubrimiento y revelación de secretos, delitos fiscales y los casos Neymar 1 y Neymar 2. Pese a quedar liberado de toda acusación, Rosell estuvo encarcelado 645 días.

Ahora le tocará el turno judicial a Josep Maria Bartomeu por el ‘Barçagate’ y el ‘caso Negreira’, en cuyas actas judiciales están también reflejados los nombres de Joan Gaspart, presidente del Barça entre 2001 y 2003, Joan Laporta (2003-2010), el propio Rosell (2010-2014) y Bartomeu (2014-2020).

La mayor parte de las crisis que afectan al FC Barcelona no suelen ser deportivas. Ningún otro club ha vivido o vive una situación similar, un hecho que debería hacer recapacitar a todos. El Barça vive en estos momentos una de sus crisis más profundas desde que se fundó el club y ese ambiente ha terminado por contaminar a la parte deportiva.

Una tormenta perfecta parece afectar a la entidad. Una tormenta en la que se ha mezclado una situación financiera muy negativa, el Espai Barça con el destierro a Montjuïc, la salida de Leo Messi y una mala planificación deportiva y peores resultados, por no entrar en más detalles.

El Barça está ya acostumbrado a los litigios extradeportivos además de los ya citados hay que recordar las sanciones de la FIFA y la UEFA o la persecución fiscal a Messi. Son casos que en su momento provocaron la formación de gabinetes de crisis.

En todos aquellos casos, o similares, sólo hay una forma en la que operar: fijar sin tapujos la responsabilidad real del club en cada uno de los problemas, reconocer lo que se ha hecho mal y actuar corporativa, judicial y mediáticamente en consecuencia de los errores cometidos. En muchos casos, por lo que se ha visto finalmente, no hubo tales errores, hubo, eso sí, campañas orquestadas en las más altas esferas.

Reconocer los fallos, de entrada, es la única forma en la que se pueden resolver las crisis, y en el caso del Barça, que parece abonado al desgaste continuo por la gestión, ese paso resulta imprescindible. Además de reconocer los fallos hay que transparente. La transparencia ha de ser total, innegociable como lo ha de ser contar la verdad y ser creíble.

Por primera vez y ya sin tapujos, a raíz de la crisis deportiva, el presidente Joan Laporta y su entorno están señalados. Empiezan a aparecer comentarios muy críticos con el actual responsable deportivo, Deco, y la gente se pregunta si este caos en el que está sumido el club y las actividades del entorno fueron la causa de la salida abrupta de Jordi Cruyff y Mateu Alemany.

Sin CEO y sin autocrítica es difícil salir de una crisis. Laporta está rodeado de fieles que no han conseguido cambiarle, ni limar algunos de sus comportamientos. Sin autocrítica y sin control de la caja -el fichaje de Vitor Roque por 30 millones de euros más 31 en variables en estos momentos que vive el club es un verdadero disparate pese a su gol del miércoles ante Osasuna- al Barça le costará remontar. Veremos que líneas de trabajo marca el presidente y que determinan sus gabinetes de crisis y como sale airoso de la crisis de su gabinete.

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Crisis de gabinete

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02.02.2024

Albert Montagut

Con el archivo del ‘caso Abidal’, que arbitraba una acusación de tráfico de órganos abierta en el Juzgado de Instrucción número 28 de Barcelona, se cierra la sexta causa contra el ex presidente del FC Barcelona Sandro Rosell.

Rosell ha visto cómo se archivaban una tras otra las diligencias abiertas contra él por blanqueo de capitales y organización criminal, descubrimiento y revelación de secretos, delitos fiscales y los casos Neymar 1 y Neymar 2. Pese a quedar liberado de toda acusación, Rosell estuvo encarcelado 645 días.

Ahora le tocará el turno judicial a Josep Maria Bartomeu por el ‘Barçagate’ y el ‘caso Negreira’, en cuyas actas judiciales están también reflejados los nombres de Joan Gaspart, presidente del Barça entre 2001 y 2003, Joan Laporta (2003-2010), el propio Rosell........

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