Albert Montagut
Llega la XL edición de la Supercopa de España y con ella, la polémica de cada año. Poco se puede discutir a cerca del formato de Final Four para dilucidar esta competición, cuyo titulo, poca broma, forma parte del sextete.
Se podría criticar el hecho de que un equipo que no haya ganado nada la temporada anterior pueda alzar el premio final, pero ese es un detalle poco importante si analizamos otras muchas cosas a cerca de este formato. El show arranca el miércoles en el estadio de la Universidad del Rey Saúd, en Riad, capital de Arabi Saudí, con un Real Madrid CF-Club Atlético de Madrid. El FC Barcelona juega el jueves ante el CA Osasuna.
La primera y más importante es que la Final Four se juegue lejos de España, lo que impide que los aficionados puedan acudir a los encuentros en los que participan sus equipos y que dilucidan el pase a la final y la final en si misma. En un caso como el de Osasuna, subcampeón de Copa del Rey, resulta vergonzoso que su afición tenga que pagar un billete transcontinental para presenciar y animar a su equipo en un partido tan histórico para la entidad.
Arabia Saudí inició hace ya unos años una campaña de lobby político, social y deportivo al máximo nivel para incorporarse a lo que podríamos denominar comunidad internacional. Dicho en otras palabras, pagar para blanquear. Inversiones en Europa, Asia y América, buenas relaciones con Estados Unidos, apoyo a Israel -de hecho, la guerra paralizó un tratado entre Riad y Tel Aviv-, ligas millonarias de fútbol, fichajes de grandes jugadores de golf y ambiciosos proyectos como el de celebrar un mundial de fútbol forman parte de la agenda saudí. Y en ese proceso de blanqueo del país, uno de los más criticados del mundo por las organizaciones de derechos humanos, le toca el turno, una vez más, al fútbol español.
La Supercopa de España en Arabia Saudí es una idea del inefable Luis Rubiales firmada en 2019 y con cuya duración de seis años terminaba esta próxima temporada 2024-2025. En junio de 2021, pese a las enormes críticas que había levantado la elección del país anfitrión, por parte de los aficionados españoles, el contrato se prolongó hasta 2029.
A cambio de trasladar a Arabia Saudí este nuevo formato de competición, una Final Four con los campeones y subcampeones de la Liga y la Copa del Rey, la Real Federación Española de Fútbol, los clubes participantes y los intermediarios, acordaron repartirse inicialmente un total de 240 millones de dólares.
Gerard Piqué, siendo jugador en activo del FC Barcelona, fue uno de los intermediarios que cobró comisiones. En aquel momento, el capitán del Barça cobró cuatro millones de euros a través de su empresa Kosmos, una de las impulsoras del nuevo formato y de su ubicación. Su participación en el negocio y su comisión levanto duras críticas.
Pero la RFEF sigue sin hacer caso de las protestas, aunque sean muchas y tengan fundamento. El Gobierno español, por su parte, no ha intervenido para nada en la polémica que ha generado este proyecto futbolístico. Es la eterna hipocresía. Se critica la violación constante de los derechos humanos en Arabia Saudí, pero se colabora con su Gobierno en todo aquello que tenga relación con el dinero.
Durante décadas los deportistas de élite de todo el mundo boicotearon el apartheid de Sudáfrica. No hay duda que aquel boicot tuvo consecuencias. La participación de los deportistas de élite en competiciones o en espectáculos deportivos en Arabia Saudí llenarán bolsillos de petrodólares, pero no servirán para cambiar ni un ápice la vida en el país del petróleo, los dólares y las dunas del desierto.
Llega la polémica (de cada año)
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05.01.2024
Albert Montagut
Llega la XL edición de la Supercopa de España y con ella, la polémica de cada año. Poco se puede discutir a cerca del formato de Final Four para dilucidar esta competición, cuyo titulo, poca broma, forma parte del sextete.
Se podría criticar el hecho de que un equipo que no haya ganado nada la temporada anterior pueda alzar el premio final, pero ese es un detalle poco importante si analizamos otras muchas cosas a cerca de este formato. El show arranca el miércoles en el estadio de la Universidad del Rey Saúd, en Riad, capital de Arabi Saudí, con un Real Madrid CF-Club Atlético de Madrid. El FC Barcelona juega el jueves ante el CA Osasuna.
La primera y más importante es que la Final Four se juegue lejos de España, lo que impide que los aficionados puedan acudir a los encuentros en los que participan sus equipos y que dilucidan el pase a la final y la final en si misma. En un caso........
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