Albert Montagut
Los periodistas se abalanzaron sobre el, pidiéndole explicaciones. La prensa de Helsinki quería saber por qué Leo Messi no había viajado en agosto de 2014 hasta Finlandia para participar en el partido amistoso entre el HJK Helsinki y el FC Barcelona. El directivo Jordi Moix sólo pudo decir que Messi estaba lesionado y que por esa razón no había viajado, pero la verdad es que el cartel del partido, visible en toda la ciudad, se vendió con su imagen y contando con su presencia.
El Barça ganó aquel amistoso al HJK por 0-6. Munir (2), Sergi Roberto, Piqué, Bartra y Sandro marcaron los goles. En aquel momento el HJK y el FC Barcelona compartían los valores de fomentar sus canteras y el desarrollo de una clara doctrina de responsabilidad social corporativa.
El HJK desarrollaba aquellos años un trabajo muy riguroso con cerca de 2.000 jóvenes. No era extraño que en las gradas del viejo estadio olímpico de la capital finlandesa hubiera muchísimos niños. Aquellos jóvenes aficionados, ataviados con camisetas, bufandas y gorras del Barça vieron a los azulgranas, disfrutaron de la magia de Andrés Iniesta, pero no consiguieron ver al astro argentino. Más de uno tuvo una sensación de frustración que seguramente aún recuerda.
Un año más tarde, ya con el triplete en el bolsillo, 2015, se tuvo que cambiar toda la cartelería de una gira por Estados Unidos –Los Ángeles, San José, Washington DC– porque en el departamento de marketing vendían la imagen de la gira con jugadores que, se sabía, no iban a viajar.
El cambio causó frustración entre los seguidores americanos del Barça, Messi no viajó pero por lo menos acudieron a los estadios a sabiendas de que el argentino no iba a jugar. Luis Suárez y Gerard Piqué eran los dos referentes publicitarios. Nadie pudo sentirse mal, porque no hubo engaño alguno. Los azulgranas jugaron contra el LA Galaxy, el Manchester United, y el Chelsea de Mourinho y Cesc Fàbregas. La imagen de la gira fue la de Kobe Bryant visitando el camp del Barça en Los Ángeles y los estadios abarrotados de público.
Aquella International Champions Cup 2015 sin Messi fue un éxito de imagen para el FC Barcelona, aunque fue interesante ver cómo enfocaban la gira americana Barça y ManU. Los rojos de Manchester customizaban hasta los autocares, algo que el Barça, por mucho nivel que tuviera la entidad, no había no previsto en aquella ocasión.
El Barça ha hecho otras muchas giras desde entonces, Asia, EE.UU. e incluso ha jugado partidos en Australia. El pasado verano, los barcelonistas acudieron a Japón para homenajear a Andrés Iniesta en su retirada del Vissel Kobe. Ya fue un partido en el que el Barça no actuó con toda su artillería, ni social, ni deportivamente. El regalo a Iniesta fue una camiseta en un cuadro. La retransmisión fue poco emotiva y el sello que pudo dejar el Barcelona en Japón, uno de sus mercados preferentes, fue muy flojo, pero no tan lamentable como el partido amistoso de hace una semana en Dallas ante el Club América.
En Texas, los mexicanos ganaron 2-3, pero el Barça perdió mucho más que un partido amistoso. El campo, el Cotton Bowl Stadium, no se llenó y el partido, ni tan siquiera fue retransmitido.
La de Dallas fue una experiencia que mina directamente la idea global del Barça. Cuando un equipo de este nivel viaja a otro continente debería tener en mente que su imagen debe salir reforzada. El viaje a Texas fue, como el de Japón para jugar ante el Vissel Kobe, un simple trámite, un partido sin magia, un encuentro que genera más frustración que alegría entre los aficionados. Las giras y los partidos amistosos deben tener, cuanto menos, alma, generar ilusión, porque eso es exactamente lo que buscan los aficionados de otras latitudes cuando una vez en sus vidas pueden ver al equipo de sus sueños.
Partidos sin alma
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29.12.2023
Albert Montagut
Los periodistas se abalanzaron sobre el, pidiéndole explicaciones. La prensa de Helsinki quería saber por qué Leo Messi no había viajado en agosto de 2014 hasta Finlandia para participar en el partido amistoso entre el HJK Helsinki y el FC Barcelona. El directivo Jordi Moix sólo pudo decir que Messi estaba lesionado y que por esa razón no había viajado, pero la verdad es que el cartel del partido, visible en toda la ciudad, se vendió con su imagen y contando con su presencia.
El Barça ganó aquel amistoso al HJK por 0-6. Munir (2), Sergi Roberto, Piqué, Bartra y Sandro marcaron los goles. En aquel momento el HJK y el FC Barcelona compartían los valores de fomentar sus canteras y el desarrollo de una clara doctrina de responsabilidad social corporativa.
El HJK desarrollaba aquellos años un trabajo muy riguroso con cerca de 2.000 jóvenes. No era extraño que en las gradas del viejo estadio olímpico de la........
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