Mònica Planas

“La historia de mi papá se contó un montón de veces. Gente que lo amó y gente que no. Pero la historia de Diego Maradona conmigo solo la puedo contar yo. Quiero contar quién fue él como persona y como padre. Quiero contar los momentos felices y los que no lo fueron tanto” confiesa Dalma Maradona a la cámara. Así empieza la serie documental ‘La hija de Dios’, un retrato del futbolista a través de los ojos de su hija mayor que ha estrenado la plataforma HBO Max. Dalma ejerce de protagonista y de productora ejecutiva. Usa una cantidad ingente de películas domésticas que la familia guarda como oro en paño para recuperar ese pasado. No es un documental para ver a Maradona darle al balón, sino que intenta perfilar la faceta más cotidiana y entrañable del personaje. Dalma nació en abril de 1987 y ella se siente, en parte, el resultado de los festejos del Mundial 86. “Llegué al mundo cuando mi papá estaba en lo más alto de su carrera” explica. ‘La hija de Dios’ es solo un pequeño fragmento del retrato poliédrico que permitiría la figura Maradona. No es un retrato perfecto, pero es la historia que necesita contarse su propia hija. Maradona acabó sumergido en un mundo sórdido, rodeado de un montón de gente y, por lo que deja entrever Dalma, ni ella misma entendía qué es lo que le estaba pasando a su padre en su última etapa. Lo cuenta en el tercer episodio titulado ‘Dolor’. Se sentía alejada de él. Muchos se apropiaron de Maradona, física y metafóricamente. La serie parece un ejercicio para conectar simbólicamente con el padre, con la esencia de lo que Dalma recuerda y que solo ella puede explicar. Viaja a Nápoles donde ella considera que hubo el punto de inflexión de Maradona para entender lo que sucedió. A lo largo de los tres episodios va hablando con personas cercanas a su padre para que le cuenten vivencias que ella no recuerda porque era muy pequeña. La mayoría de los testimonios acaban llorando e insisten a Dalma que intente quedarse “solo con los recuerdos bonitos”. Y así lo refuerzan las imágenes de archivo de los Maradona. ‘La hija de Dios’ es un ejercicio terapéutico de Dalma Maradona para sentir que, aunque tanta gente aduló y se aproximó al futbolista, ella tuvo un papel único y esencial en su vida. Es un ejercicio de una hija para reapropiarse de la figura de su padre.

Las películas domésticas

La serie ‘La hija de Dios’ está repleta de las películas filmadas con cámara doméstica en casa de los Maradona. Muchas de ellas son inéditas. Escenas familiares, juegos con sus hijas, incluso el instante en que Maradona ve a su hija mayor por primera vez, recién nacida. Sin duda, estas grabaciones muestran un ámbito más desconocido y entrañable del personaje, aunque emanan también cierta tristeza. Muestran un personaje que desapareció para convertirse en otro.