Víctor Muñoz

Los dos últimos partidos disputados en Montjuïc frente a Porto y Atlético nos había devuelto la ilusión de los resultados pero tras la dura derrota frente al Girona hay que hacer un análisis constructivo. Iñaki Peña no pudo hacer nada en los remates, todos ellos cercanos e imparables. La defensa cometió muchos errores pareciendo no estar coordinada sobre todo en el gol de Miguel Gutiérrez. Había avisado dos veces con mucho peligro y la zaga local no supo corregir y tampoco los técnicos desde la banda. Y, por si fuera poco, en los últimos minutos rompió en profundidad a la espalda de la defensa culé y esperó la llegada de Savio, que fue el asistente de Stuani en el definitivo gol. Míchel esta vez le ganó la partida a Xavi dentro y fuera del campo.

Analizando el centro del campo, es verdad que De Jong es el más defensivo, Gündogan y Pedri son creativos que frente al Atlético estuvieron brillantes, pero fueron ayudados por Raphinha y Joao Félix, que apenas participaron en el último partido. Pienso que esa fue la causa principal de la derrota. Siempre había superioridad en el centro del campo del Girona, Aleix Garcia e Iván Martín, casi siempre tenían las ayudas posicionales de Couto por la derecha y Miguel por la izquierda además de Tsygankov y Savio, que ayudaban cuando no tenían el balón. No me puedo olvidar del acierto en la mayoría de los duelos de Eric Garcia y Blind, que manejaron el posicionamiento de su equipo y las distancias entre líneas a la perfección.

Ahora debemos dejar atrás la derrota y pensar en ganar el partido de Champions de hoy. Las rotaciones frente al Amberes son necesarias. Una derrota dejaría tocado al equipo moralmente para jugar en Valencia y además nos podría dejar detrás del Porto en el grupo, en cuyo caso el rival de la próxima eliminatoria sería otro más poderoso. Se suele decir que da igual el rival, pero en el fondo no es así. La regularidad en el juego y la precisión para marcar goles nos tiene que volver aparecer en un equipo grande en los próximos partidos y hasta el final.