El contrabando, aquella actividad ilegal que se filtra por las extensas fronteras de Bolivia, ocasiona cuantiosas pérdidas económicas al país y está acabando con el empleo formal, según un estudio realizado por la Cámara Nacional de Industrias (CNI).
Dos conclusiones destacan de este estudio: que la participación de los jóvenes en el mercado laboral asalariado ha disminuido en más del 12% en la última década y que los trabajos informales o por cuenta propia se han incrementado en al menos 15%.
“Esto indica un marcado desplazamiento hacia una economía menos formalizada, con menos seguridad laboral y beneficios asociados”, puntualiza una de las conclusiones de este estudio. El mismo da cuenta de que el 53% de la población encuestada piensa que el contrabando es la causa para que las empresas nacionales cierren y que cada día haya menos empleos en el país.
Los datos presentados por la Cámara Nacional de Industrias son una muestra de una realidad que se observa cada día en las diferentes ciudades del país: la precarización de las fuentes de empleo, es decir, que la informalidad gana terreno en los diferentes rubros porque las empresas no pueden cargar con todas las obligaciones laborales que la Ley General del Trabajo dispone debido a que miles de toneladas de mercadería de contrabando son ingresados cada día, a precios mucho más bajos que los que ofrecen las industrias en Bolivia, que pagan impuestos y beneficios sociales a sus trabajadores.
Muchos emprendedores han optado por bajar los salarios, a causa de la crisis económica, y dejar de lado los beneficios sociales, es decir, incurrir en la informalidad porque no pueden competir con el contrabando que trae productos a precios más bajos, sin importar su calidad o si está garantizada su inocuidad alimentaria.
En ese entendido, si se quiere recuperar la formalidad y el empleo de calidad en el país, la primera tarea será la de luchar frontalmente contra el contrabando, pero no solo en los discursos que se escuchan todos los días, sino en los hechos, cerrando el paso a quienes se dedican a esta actividad que les otorga lucrativas ganancias.
Para que la lucha contra el contrabando sea más efectiva se tendrá que, además, acabar con la corrupción que aún impera en algunas entidades estatales, donde funcionarios corruptos permiten el paso de miles de toneladas de contrabando a cambio de sobornos, o por lo menos se hacen de la vista gorda cuando se traslada por las fronteras productos ilegales.
Si se permite que el contrabando siga ingresando al país, la informalidad en los empleos seguirá creciendo, al mismo tiempo que los salarios bajarán aún más, lo que implica que la calidad de vida de miles de familias bolivianas se volverá más precaria.
Contrabando: más informales, menos empleados jóvenes
9
0
27.03.2024
El contrabando, aquella actividad ilegal que se filtra por las extensas fronteras de Bolivia, ocasiona cuantiosas pérdidas económicas al país y está acabando con el empleo formal, según un estudio realizado por la Cámara Nacional de Industrias (CNI).
Dos conclusiones destacan de este estudio: que la participación de los jóvenes en el mercado laboral asalariado ha disminuido en más del 12% en la última década y que los trabajos informales o por cuenta propia se han incrementado en al menos 15%.
“Esto indica un marcado desplazamiento hacia una economía menos formalizada, con menos seguridad laboral y beneficios asociados”, puntualiza una de las conclusiones de este........
© Opinión
visit website
login
who are we?
contact us
qosheapp
Toi Staff
Gideon Levy
Belen Fernandez
Andrew Mitrovica
Mort Laitner
Rami G Khouri
Nikkei Editorial
Ali Fathollah-Nejad
