Cientos de miles de empadronadores voluntarios están listos para cumplir una importante misión el próximo 23 de marzo, jornada en la que llegarán a los hogares de los nueve departamentos del país para aplicar la boleta censal, como parte del Censo Nacional de Población y Vivienda 2024.

El Instituto Nacional de Estadística (INE) informó en los últimos días que se logró registrar a más del 80% de los censistas que se requieren para aplicar la encuesta el día del censo, que las cajas censales de seis departamentos están listas y que la organización de esta crucial actividad para el país marcha de acuerdo a lo establecido.

No obstante, existe preocupación a causa de los conflictos sociales que persisten en algunas regiones del país y los bloqueos que se implementaron en los primeros 22 días de esta gestión.

La organización del Censo Nacional de Población y Vivienda 2024 implica para el país un costo elevado, de más de 60 millones de dólares, además de que se movilizará el día de la encuesta a miles de personas (se debe registrar a 650.000 voluntarios) para su implementación, por lo que es prioridad que se llegue a buen puerto el próximo 23 de marzo.

Pero, además de la inversión económica que implica la realización del censo, es urgente que se aplique esta encuesta nacional para tener una radiografía lo más precisa posible de la situación del país.

Es importante conocer cuánta población tiene el país, en qué condiciones vive, qué le hace falta, la calidad de empleo de los hombres y mujeres en edad de trabajar, en qué aspectos se debe mejorar, donde se tiene que implementar los servicios básicos o si se requiere construir hospitales, escuelas, entre otros.

Asimismo, es importante conocer cuál es la situación de los idiomas nativos, si aún se hablan con regularidad o qué porcentaje de la población sufre algún grado de discapacidad.

Para implementar proyectos de desarrollo desde el Gobierno central, gobernaciones o alcaldías es imprescindible contar con datos exactos, de modo que se conozca con precisión qué hace falta para que se pueda invertir recursos económicos y humanos de forma puntual, sin desperdiciar nada.

El Censo Nacional de Población y Vivienda 2024 no debe contaminarse con los discursos políticos o los chantajes de algún sector que tiene demandas justificadas o simplemente aprovecha la coyuntura para exigir con bloqueos o movilizaciones.

Al contrario, todos los sectores deben sumar para que el censo se realice de la mejor manera posible, de modo que en el menor tiempo se tengan los datos que permitan implementar los proyectos que requiere la población.