Descubrir la mística de la mística en lo ritual, ancestral, espiritual, vida.

Acariciar, abrazar la historia no escudriñada, simplemente vivida.

Lo sagrado, lo divino está en instantes del todo, la comunidad nos enseña a tejer, tejedoras sinrazón solo vivir con un corazón abierto.

Cenizas del polvo, sabiendo que somos polvo, polvo a la eternidad con el Eterno. Soplo de incienso, humos misteriosos renovadores, como un instante de bendición. Tipos sencillos. Dialogo de culturas desde la espiritualidad.

Dulzura de colores que está en cada rincón terrenal llegando a la espiritual, creyendo como todo ser vivo.

Olores, aromas, candela, armónicamente agradecimiento de agradecimientos en acurrucar tradiciones acariciándonos en nuestras diferencias.

Negarte es negarnos existencialmente.

Los amaneceres, atardeceres y anocheceres, fuego encendido desde el alma que se va gastando como frágiles efímeros siendo caídos recurrentes terrenalmente. Carbón como un diamante de miles y miles del tiempo no tiempo, se blanquea colorea, canas del carbón con último eslabón del polvo.

Chuspas, sombreros, abarcas, polleras, copetes, es mirarse al espejo de nuestra historia. Romanticismo equivocado o tal vez no. Ritualidad Sagrada a menester de paz. Ilumina al challar el diálogo eterno.

Sincretismos purísimos sin ismos con abismos, solo nosotros mismos. Purificarnos en conversión mamita Candela. Bailando creyentemente a un arrodillar de fe, llenándonos los vacíos existenciales o vaciando las certezas humanamente.

Aguayos fuertemente acogedores, ancestros que saludan sin saludar aventurados con el eterno.

El rostro con arrugas, marcas profundas de signos vivenciales, no basta decir a mi manera, serenamente las arrugas hablan con las cenizas penetrando las rasgaduras hasta lo más profundo de las entrañas dulce trino. Enredados.

Escuchar es tan difícil, solo estigmas, prejuicios, con silencios que ensordecen. Los sordos lo hacen desde el corazón sin razón. Coplas de coplas solo copas. Alegrarnos con tristeza o tristemente alegrarnos. Milagros de admirarnos por cada instante de no instantes en el camino, no en la llegada, llegada en paz. Un libro sin título, ni presentación es la vida, solo nació, misterio del eterno que es vida.

Locura con aventura sin censura ni culpa. ¡Hasta siempre!

FORO

WILLIAM AGUILAR BOLAÑOS

Escritor, abogado

[email protected]