Diferentes medios de comunicación dan cuenta de una millonaria demanda que han elevado los fiscales de 44 estados de Estados Unidos al conglomerado Meta, dueño de diversas plataformas, entre ellas Facebook, WhatsApp e Instagram, alegando que “han desarrollado sus productos aprovechando tecnologías poderosas para atraer, involucrar y en última instancia fomentar la adicción de los jóvenes”, aun cuando Facebook e Instagram se desaconsejan para menores de 13 años.
La querella está fundamentada en la renuencia a aceptar resarcir los males causados y hacer más explícitos los peligros que representan el uso de sus redes para la población más joven, según un juicioso estudio revelado en 2021. El fiscal General de California, Rob Bonta, afirma que “Meta ha estado dañando a nuestros niños y adolescentes, cultivando dependencias para disparar sus ingresos corporativos a pesar de contar con un documento interno que establece que el 13.5 % de las adolescentes piensan que Instagram empeora los pensamientos suicidas y el 17 % que les ocasiona trastornos alimenticios”.
En USA, la utilización de estos medios alcanza un nivel casi universal. Mientras que el 95 % de los jóvenes entre 13 y 17 años visita regularmente una aplicación digital; un 33 % lo hace de manera permanente.
Aunque no se disponen de estudios y datos concluyentes para Colombia, es evidente el notorio auge de su uso con fines recreativos por parte de niños y adolescentes; la marcada influencia en sus hábitos y modas; así como la hipersensibilidad a comentarios relativos a su apariencia o comportamiento. Bien harían las instituciones educativas y diferentes entes gubernamentales en impulsar investigaciones sobre el asunto, cuando las cifras divulgadas por el Instituto Nacional de Salud revelan un preocupante y generalizado aumento de iniciativas de suicidio y de afectaciones mentales.
El educador Julián de Zubiría manifiesta que posee sondeos según los cuales el 80 % de los estudiantes percibe que las redes están elevando sus niveles de ansiedad, tristeza y angustia; y un porcentaje similar considera que consume tiempo excesivo en las pantallas. Sin vacilar, sostiene que ha llegado el momento de prohibir los celulares para los niños de primaria; instaurar el control parental para los jóvenes en los primeros años del bachillerato; y recomendar la eliminación de las notificaciones que producen las plataformas para alumnos de noveno, décimo y once, y, también, para todos los adultos.
login
who are we?
contact us
qosheapp
Toi Staff
Gideon Levy
Belen Fernandez
Rami G Khouri
Mort Laitner
Rachel Marsden
Donald Low
Bradley Blankenship
Ali Fathollah-Nejad
Nikkei Editorial
Abbas Juma
Michael Kwet
visit website
