Culminan los juegos deportivos nacionales celebrados en el Eje Cafetero y la delegación de Santander cierra su participación en el séptimo puesto de la clasificación general, mejorando una posición con respecto a los pasados juegos.

Ya finalizando, Santander bordeaba las 90 medallas, con un total de 19 preseas doradas, 26 de plata y 37 de bronce, en una decorosa competición que sin duda superó ampliamente lo alcanzado en justas anteriores. Veníamos de ocupar posiciones secundarias y un octavo puesto poco atractivo en comparación con otros departamentos.

En medio de tantas controversias y a pesar de los escándalos de corrupción que rodearon al Instituto de Deportes de Santander en esta administración, resulta importante haber obtenido una buena figuración nacional en estos juegos deportivos, producto de la disciplina y la consagración de los propios deportistas, entrenadores y equipos técnicos.

De destacar, sin duda, la medalla de oro de la squashista Lucía Bautista, quien se coronó campeona en la categoría individual femenina, consagrándose como la mejor exponente del squash en Colombia y revalidando su brillante participación en los pasados juegos panamericanos de Santiago de Chile.

Innegable también, el oro obtenido por la pareja femenina de Voleibol Playa, integrada por Margarita Guzmán y Tatiana Ayala, quienes sin ser las grandes favoritas lograron el máximo galardón. Y también muy significativa la medalla dorada que nos entregó el nadador Juan Daniel García, así como el oro logrado por Pedro Javier Gutiérrez en el tiro deportivo. Y sensacional el primer lugar de Valeria González en la maratón femenina del patinaje.

Muy meritorios los segundos y terceros puestos obtenidos por una gran cantidad de deportistas, destacándose en el ciclismo Ana Cristina Sanabria y en judo Esteisy Díaz. Y las medallas de plata y bronce de Héctor Morales en canotaje.

En fin, que no fue discreta la participación de Santander en estos juegos y que incluso, por poco ascendemos hasta dos puestos en la clasificación final. Pero hay que seguir motivando a los deportistas con el apoyo gubernamental, el ejemplo del Valle del Cauca es notorio. Hay que seguir invirtiendo en buenos entrenadores, en el mejoramiento de las instalaciones deportivas y en el equipamiento de los deportistas.

Se espera mucho de los nuevos gobernantes y el deporte no es ajeno a esas prioridades. Más recursos y cero corrupción. ¡Es un clamor!