Compartir

Siempre se me dijo de López de Mesa y Marco Fidel Suárez que son imposibles de entender, pues lo que escribían eran verdaderos galimatías. Ocurrió todo lo contrario. Eduardo Durán Gómez, presidente de la Academia de la Lengua, me obsequió el libro “Muestra Ontológica”, que contiene escritos de estos dos grandes genios del idioma español. De López de Mesa: “…hacia la Aldehuela actual de Iznik, en el Asia Menor, antigua Bitinia, se encaminaron 318 obispos de la nueva fe que entonces conquistaba el mundo”.

Y en lo que hoy es una humilde mezquita aldeana, y de vez en cuando, al final sobre todo, en el palacio de Constantino, discutieron durante siete años acerca de la persona de Dios y de los excelsos atributos de la Virgen Madre …'

Yo diría que lo que se dice de Luis López de Mesa es tan falso, como una “moneda de cuero”, para decirlo como dicen en mi tierra, que no sé cuál es, porque los de Puerto Wilches dicen que soy de Zapatoca y los de Zapatoca dicen que soy de Puerto Wilches.

Sigamos entonces con una muestra de lo escrito por Marco Fidel Suárez, quien fuera presidente de la República.

Para apuntar algo “…una breve muestra que sea del castellano de estos siglos, y de estas comarcas, le basta a cada uno buscar en la memoria aquellas palabras que oyó en sus niñeces y que resisten a la ausencia, a la vejez y a la demencia misma. Allí la del cacique que señoreó la tierra, luego el arroyo bautizado con el apodo africano de un esclavo”

Estas eran las palabras bellas tan castizas como “maizal” que viene del árabe y de la que dice el mismo Marco Fidel Suárez, mucho más castizo que “humeral”

Es imposible olvidar aquí el doloroso episodio del debate que le hizo el “monstruo” Laureano Gómez en el Senado a Marco Fidel Suárez, por haber vendido la nómina de su sueldo como presidente de la República, para salvar a su hijo de una deuda en el extranjero.

¿Cómo pusieron al niño? Decimos en Colombia, según Suárez. Sustituto de ¿Qué nombre le pusieron al niño?

Doy un salto mortal en el tiempo. Qué gran escándalo se armaría en épocas pasadas, con las leyes de la fonética que Petro, posando de lexicógrafo, reformador de todo y de nada, en su afán feminista señale en un discurso que las vacas se llamarán “toras” . El cóndor del escudo será “cóndora”, los novios de mis hijas serán “yernas” y así hasta el infinito en una confusión de género donde doña Sol, mi vecina, se llamaría " Sal”, que entre otras cosas ese nombre como que le caerá mal.

QOSHE - De la Lengua - Sergio Rangel
menu_open
Columnists Actual . Favourites . Archive
We use cookies to provide some features and experiences in QOSHE

More information  .  Close
Aa Aa Aa
- A +

De la Lengua

19 0
28.04.2024

Compartir

Siempre se me dijo de López de Mesa y Marco Fidel Suárez que son imposibles de entender, pues lo que escribían eran verdaderos galimatías. Ocurrió todo lo contrario. Eduardo Durán Gómez, presidente de la Academia de la Lengua, me obsequió el libro “Muestra Ontológica”, que contiene escritos de estos dos grandes genios del idioma español. De López de Mesa: “…hacia la Aldehuela actual de Iznik, en el Asia Menor, antigua Bitinia, se encaminaron 318 obispos de la nueva fe que entonces conquistaba el mundo”.

Y en lo que hoy es una humilde mezquita aldeana, y de vez en cuando, al final sobre todo, en el palacio........

© Vanguardia


Get it on Google Play